medidas DE AUSTERIDAD DEL GOBIERNO BRITÁNICO

Cameron enoja a los militares con unos severos recortes en Defensa

David Cameron, durante la visita de ayer a los cuarteles de operaciones de las Fuerzas Armadas en Northwood.

David Cameron, durante la visita de ayer a los cuarteles de operaciones de las Fuerzas Armadas en Northwood.

BEGOÑA ARCE
LONDRES

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Apartir de hoy nada volverá a ser igual en el Reino Unido. El Gobierno de coalición que preside el conservador David Cameron pondrá a los ciudadanos británicos contra las cuerdas cuando desvele en el Parlamento un plan de austeridad sin precedentes para los próximos cinco años. En la larga lista de servicios, ayudas y derechos suprimidos habrá muchas de las conquistas del Estado del bienestar. Llevó siglos conseguirlas y van a desaparecer de un plumazo. Cameron ofreció ayer un pequeño avance de por donde van los tiros al detallar los recortes en el Departamento de Defensa.

A pesar de que es uno de los departamentos menos afectados por las restricciones (su presupuesto se verá reducido el 8% para el 2015, frente al 20% de otros ministerios) la revisión, realizada en tan solo cinco meses, será traumática: bases condenadas al cierre, ambiciosos proyectos cancelados, escuelas de formación suprimidas, reducción de tanques, fragatas y aviones.

Durante los próximos cinco años el Ministerio de Defensa prescindirá de 25.000 empleados civiles, el Ejército perderá 7.000 miembros de su personal, la aviación, 5.000, y la marina otros 5.000. El buque insignia de la Royal Navy, elHMS Ark Royal, el único plenamente operativo de la flota de guerra británica, será desmantelado «con efecto inmediato», cuatro años antes de la fecha en que debía quedar fuera de servicio.

La decisión implica que el Reino Unido no dispondrá de capacidad para hacer despegar sus aviones caza desde los portaaviones hasta el 2019. Ese año dispondrá de uno de los dos nuevos portaviones, cuya construcción sigue adelante, porque cancelar los contratos resultaba más caro que construirlos. La renovación del programa Trident de disuasión nuclear ha quedado aplazada al menos cinco años, hasta después de las próximas elecciones.

En la revisión, las partidas más afectadas son las más convencionales en Defensa, como los tanques y la artillería pesada, que serán reducidas en un 40% y un 35%, respectivamente. El documento la Estrategia de Seguridad Nacional, publicado el lunes, apuntaba al terrorismo y los ciberataques como los nuevos riesgos que acechan al Reino Unido.

REPROCHES DE UN PILOTO / Cameron defendió la adaptación «de las Fuerzas Armadas a los tiempos modernos», pero su plan ha despertado muchas críticas. Durante una visita por la mañana a los cuarteles de operaciones de las Fuerzas Armadas, un piloto de los aviones de combate Harrier, Kris Ward, le plantó cara. «He volado en 140 misiones en Afganistán y ahora me encuentro potencialmente en paro. ¿Cómo cree que debo sentirme?», le preguntó. Los Harrier van a ser suprimidos. Un veterano profesional, el coronel en la reserva Stuart Tootal, admitió que «algunos de los recortes tienen un cierto sentido», pero a su entender existe una profunda preocupación «de que la revisión se haya llevado a cabo pensando más en los costes que en la estrategia».

LLAMADA DE OBAMA / La inquietud alcanza el otro lado del Atlántico. Cameron habló telefónicamente la noche del lunes con el presidente estadounidense, Barack Obama, para asegurarle que el Reino Unido seguirá siendo una potencia militar mundial de primer orden. En la Cámara de los Comunes, el primer ministro afirmó que a pesar de la revisión a la baja el país seguirá siendo la cuarta potencia militar del mundo y cumplirá su compromiso con la OTAN de dedicar un 2% del PIB a Defensa. No habrá tampoco recorte en los fondos para las tropas en Afganistán, que se nutren de una partida especial del Tesoro.