CONTROVERSIA RELIGIOSA

Fumata negra para el 'cura legionario'

Reunión de vecinos de Sanfeliu para pedir la expulsión del 'cura legionario'.

Reunión de vecinos de Sanfeliu para pedir la expulsión del 'cura legionario'. / periodico

VÍCTOR VARGAS LLAMAS / L'HOSPITALET

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Humo denso y oscuro, como el que cabría esperar en una fumata negra. Así ha sido el ambiente que ha flotado alrededor del Centro Cultural Sanfeliu, en L’Hospitalet, en la presentación de la campaña para expulsar de la parroquia del barrio al padre Custodio Ballester por haber acogido una misa de homenaje a la División Azul. El divorcio se palpa en parte del vecindario, el que se muestra hastiado de la idiosincrasia del religioso y de que el barrio sea identificado por las colaboraciones con colectivos paramilitares.

La iniciativa, que cuenta con el respaldo del ayuntamiento, ha congregado a más de un centenar de  personas, la gran mayoría con la firme voluntad de consensuar la hoja de ruta para que los sermones del padre Custodio se escuchen lejos de L’Hospitalet. Pedro Palacios, miembro de Unitat contra el feixisme, coorganizadora del acto, ha leído un manifiesto en el que se ha denunciado "la utilización de banderas, uniformes y fotos de simbología nazi y franquista", convirtiendo al templo de la Immaculada Concepció en un "centro de exaltación de ideas anticonstitucionales" y creando un "clima de crispación en el barrio".   

Los asistentes han acordado manifestarse ante la sede del Arzobispado de Barcelona el próximo 24 de marzo, concediendo un periodo de tiempo suficiente para la "masiva recogida de firmas" con las que esperan hacer cambiar de opinión a la ArchIdiócesis. "Esperamos el apoyo de vecinos de toda la Barcelona metropolitana para expulsarle no solo de la ciudad, sino de Catalunya", ha espetado Vicente Díaz, vicepresidente vecinal.

Pere ha hablado de la dificultad de la empresa, ante un religioso "respaldado por el Opus Dei", pero Iván ha mostrado la necesidad de "normalizar" la cotidianeidad de la parroquia y que se recupere "como un referente de convivencia". Le ha respaldado Ángela, que reside frente al templo católico, y ha relatado el "miedo" que siente al escuchar vivas a Franco desde su casa. El señor Montilla ha lamentado que otras iniciativas previas contra las prácticas del padre Custodio se hayan suprimido por respetar a sus feligreses. "¿Y a nosotros, quién nos respeta?", ha apostillado.

EN CAMPO CONTRARIO

También algunos de los feligreses del párroco han tenido el ánimo de jugar en campo contrario para respaldarle. Eddy Ruiz se ha presentado como militar y ha afirmado que "todo el mundo merece una misa de difuntos". Un vecino ha aceptado el planteamiento, pero ha considerado innegociable homenajear a una unidad cómplice del régimen nazi y su legado de millones de muertes.

José Antonio Roca ha asegurado que asistió al acto y que solo fue "una misa con la presencia de uniformes y estandartes". Desde el público le han recordado las fotos en las que se ve a asistentes brazo en alto, realizando el saludo fascista, y la presencia de la bandera española preconstitucional, algo que a Roca no le ha contrariado.

Juan Barreiro, un feligrés que lleva 15 años asistiendo a las liturgias del padre Custodio, le ha apoyado, pero considerando que pecó de ingenuidad. "Le advertí de que parte de la gente que lo promueve se aprovecharía de la cobertura para obtener publicidad -ha sostenido-. Pecó de buena voluntad por dar una misa a los abuelitos que se lo pidieron y le colaron un gol”.