CELEBRACIÓN EN SANDRINGHAM

Catalina y Guillermo bautizan a Carlota en familia

El príncipe Enrique, que está en África, fue el único ausente

Catalina y Guillermo bautizan a Carlota en familia_MEDIA_1

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La princesa Carlota Isabel Diana, cuarta en la línea de sucesión al trono británico, fue bautizada este domingo en Sandringham, en el condado de Norkfolk, en una ceremonia privada. Se desarrolló en la iglesia de Saint Mary Magdalene, la misma donde fue bautizada la desaparecida princesa Diana, abuela del bebé.

El príncipe Guillermo y su esposa, Catalina, ambos de 33 años, y su primer hijo, Jorge, que el próximo día 22 cumplirá 2 años, llegaron a pie a la iglesia. Catalina vestía un un vestido color crema de Alexander McQueen y empujaba un cochecito de época que la reina utilizó con sus hijos en la década de los 50, mientras que su marido daba la mano al pequeño Jorge, muy elegante con bermudas rojas y camisa blanca.

El arzobispo de Canterbury y primado de la Iglesia de Inglaterra, Justin Welby, se encargó de dar el primer sacramento a la pequeña ante 21 invitados de la familia y amigos íntimos. No faltaron la reina de Inglaterra, de 89 años, y su marido, el príncipe Felipe, de 94, bisabuelos del bebé; el príncipe Carlos, el abuelo;y su esposa, Camilla. También estaban los abuelos por parte materna, Carole y Michael Middleton, junto a sus hijos, James Pippa. Tampoco faltaron los cinco padrinos y madrinas de Carlota, entre ellos Laura Fellowes, prima de Guillermo e hija de la hermana mayor de la princesa Diana.

Enrique, ausente

La única ausencia señalada fue la del príncipe Enrique, hermano de Guillermo, que trabaja en África dedicado a proyectos humanitarios y medioambientales.

Los duques de Cambridge quisieron agradecer las muestras de cariño de los cientos de personas que se concentraron en las inmediaciones y que pudieron ver al bebé, ya que antes de entrar en la iglesia su madre la cogió en brazos. Tras el servicio religioso, la celebración continuó en la Sandringham House, residencia de los duques de Cambridge, donde se sirvieron te y pasteles.