Y el 23, ¿qué?

«Subiremos los impuestos»

Manuel Bustos, presidente de la Federació de Municipis de Catalunya, anuncia ajustes

Sincero  Bustos, alcalde de Sabadell y presidente de la Federació de Municipis de Catalunya.

Sincero Bustos, alcalde de Sabadell y presidente de la Federació de Municipis de Catalunya.

JOSEP-MARIA URETA

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Manuel Bustos (Pedralba, Valencia, 1961), alcalde de Sabadell a propuesta del PSC, sustituyó labores tranquilas en museos como el Tèxtil de Terrassa y el Paleontològic de Sabadell

por la agitada actividad política. Hoy compagina la alcaldía con la presidencia de la Federació de Municipis de Catalunya (FMC), cargo desde el que analiza las elecciones que se celebrarán el próximo 22 de mayo.

-Usted ya tiene experiencia para saber qué va a pasar el día 23. ¿Qué van a hacer los que repitan? ¿Qué se van a encontrar los nuevos?

-Los que tengan la oportunidad de seguir trabajando, que lo hagan, y los que se encuentren en una situación diferente… también. El 23 de mayo es lunes y día laborable para los que tienen trabajo. Y los que están en paro tendrán que seguir buscando. Pero en el ámbito político comienza un nuevo periodo en el que podemos asistir a cierta inestabilidad si no hay gobiernos fuertes.

-¿Qué teme?

-La incorporación en el ámbito local de partidos que han nacido con un recorrido de historia corta puede originar inestabilidad. Esta es la primera vez que manifiesto esa preo-

cupación como presidente de la Federació de Municipis de Catalunya: necesitamos gobiernos fuertes. Los grupos minoritarios que no tienen un compromiso con los valores que representan las organizaciones que denominamos clásicas pero que se han renovado pueden propiciar ejecutivos débiles que impidan mayorías estables. Los problemas de Estado los afrontan gobiernos de Estado, pero los ayuntamientos estamos para resolver los problemas de las personas, de los ciudadanos.

-Entiendo que habla de la xenofobia.

-Todo lo que sale en ese aspecto lo hace para mal. El debate no es riguroso ni tranquilo, sin pasión.

-Volvamos a las facturas pendientes en el cajón.

-En Catalunya hay pocos ayuntamientos que escondan facturas. Las que hay son asumibles. El municipalismo catalán no es comparable al del resto de España. Los ayuntamientos más endeudados no son los de Catalunya: mire Madrid, Zaragoza y Sevilla, da igual el color político. Otra cosa es que se retrasen los pagos porque falta liquidez.

-¿Lo perciben los electores?

-No. Es paradigmático lo de Madrid y Barcelona. La primera tiene mucho más déficit y más deuda, pero Alberto Ruiz-Gallardón, del PP, tiene más cerca la reelección, mientras que Jordi Hereu, del PSC, está más castigado. La ciudadanía dice que resuelva el déficit quien lo causa, aunque está más preocupada por el paro y el recorte de servicios básicos que por si un municipio está muy endeudado.

-¿Veremos a alcaldes anunciando expedientes de regulación de empleo como en el sector privado?

-Los ERE serán posibles en las empresas con contratos laborales. La legislación actual impide despedir a funcionarios. Espero que si ha pasado lo peor de la coyuntura económica ese ajuste sea asumible.

-Cerrarán servicios.

-No los que han de prestarse porque son servicios básicos. No vamos a apagar las luces, pero quizá bajemos la intensidad y estarán encendidas menos tiempo.

-Menos alegrías en la fiesta mayor.

-Menos paellas y más fideuás, que son más baratas. Y si hace falta, se elimina la fideuá, pero no la fiesta. Se puede pasar de tres conciertos a uno y con grupos locales. Recortar lo que se quiera, pero no aquello que mantiene el sentimiento de pertenencia, como la fiesta mayor.

-¿Es un derecho?

-La fiesta es compartir un espacio público. Es respeto y tolerancia, genera cultura. No hay que dejar de hacer cosas porque hemos hecho ciudad a partir de valores construidos durante 32 años de democracia local. Después de la sociedad de derechos, ahora toca hacer una sociedad de deberes, sacrificios y contribución.

-Parece una manera de justificar que se acabaron los ingresos.

-Subiremos los impuestos, pero no la presión fiscal. El IBI, los vados, el de circulación... Pero nunca por encima del IPC. En cuanto a las inversiones, tras los planes E y E2 del Gobierno, la gente ha de entender que se acaba ese periodo. Si hemos hecho siete bibliotecas, la octava tardará.

-Se acabaron los ingresos por el auge inmobiliario y ahora hay desahucios. ¿Qué proponen?

-La mediación entre entidades financieras y familias antes de llegar a los juzgados. Hemos pasado de la promoción a la gestión inmobiliaria. La estamos haciendo desde hace meses. Nos dirigimos a cajas y bancos y les decimos: «Usted tiene un piso cerrado, por lo tanto, o lo alquila o se lo okupan. Yo le busco quien le pague un alquiler razonable».

-En diciembre, sus interlocutores en las otras administraciones les dijeron que esperaran a las municipales, y ahora, a las generales del 2012.

-Los ayuntamientos somos siempre gobierno, no oposición, mande quien mande.