Tesis

El 23 de julio del 2003, el mundo académico madrileño acogió con todos los honores a un nuevo doctor, que había elegido investigar a fondo sobre las razones del espectacular éxito de la política económica de José María Aznar, iniciada en 1996 y a punto de concluir un año después (eso no se sabía aquel día). Título de la tesis: El ajuste fiscal: un modelo explicativo del crecimiento de la economía española en la segunda mitad de los noventa. Director de tesis, el catedrático Ángel Luis López Roa, hoy consejero del Banco de España y encargado de redactar el modelo de inspección del banco emisor. Entre los miembros del tribunal, José María Martín Quemada, hoy presidente del Tribunal de la Competencia.

Doctorando, Rodrigo Rato, siendo aquel día vicepresidente de Economía de Aznar. O sea, Rato se doctoraba sobre sí mismo, en Economía pese a haber cursado Derecho. Silencio total del mundo académico. No es demagogia -sacar de contexto hechos ciertos- sino una simple reflexión de lo bueno que es relacionar polvos y lodos. ¿Cómo iban a tener el mínimo sentido de la decencia quienes han considerado la gestión pública española (incluye la academia) una urbanización exclusiva? ¿De verdad alguien cree que hay contricción y propósito de enmienda?