Solidaridad local auspiciada por empresas

Una empresa con la misión de mejorar el entorno local. La razón de ser de Citycise se podría resumir así, objetivo que Susana Fernández, fundadora y consejera delegada, sigue manteniendo. Y, además, buscan contagiar esa filosofía a otras empresas privadas. La ‘start-up’ elabora proyectos que desarrollan el aspecto social y medioambiental de las ciudades, que después buscan financiación de compañías.

Estas colaboraciones propician que las empresas piensen mucho más allá de la responsabilidad social tradicional. Citycise aspira a "incorporarlo en el ADN" de las sociedades participantes. La impulsora de la iniciativa ve en ellas un gran potencial porque tienen "el poder, la autonomía, recursos e influencia para impactar positivamente en las comunidades".

Además, el cambio de actitud en las sociedades les beneficiara a largo plazo ante los ‘aspiracionales’. Estos ciudadanos, antes de comprar un producto, se interesan cada vez más por si la compañía actúa para mejorar el entorno local. También toman una actitud proactiva, siendo muy probable que participen como voluntarios en proyectos organizados por Citycise.

La idea empezó su andadura en el 2015 con el lanzamiento de su página web. De momento, su actividad se centra en España, siendo de las pocas iniciativas empresariales que trabaja con la solidaridad. En el extranjero, el sector de voluntariado 'online' está más desarrollado. Desde la compañía admiten que trabajar aquí resulta "especialmente duro porque todavía las empresas no están concienciadas" de los beneficios que acarrean financiar estas iniciativas.

EXPERIENCIAS CONCRETAS

Una de las excepciones es Aigües de Barcelona. Con ellos han organizado una de sus últimas acciones en Cornellà de Llobregat, donde voluntarios de ambas empresas decoraron los desagües con dibujos de animales marinos. Y unos meses antes cambiaron los nombres de 12 calles de la ciudad condal, sustituyendo las placas que recordaban a personajes masculinos por nombres de mujeres relevantes.

Esta última acción la clasifican como de ‘guerrilla’, que conciencian sobre problemas y requieren una inversión reducida. Por lo que este tipo de iniciativas las financia la propia empresa, sin buscar un apoyo financiero externo. Citycise aspira a realizar cinco o seis proyectos de ese tipo al año. Planean utilizar los beneficios obtenidos en actividades patrocinadas por empresas que trabajen en el entorno donde se realice.

La fundadora aportó íntegramente la inversión inicial de Citycise. Actualmente, la empresa emplea a dos personas y externaliza muchos de los servicios que necesita. Trabajan con Ondho, que les presta sus servicios como agencia de marketing digital. Además, cuentan con Enfemenino.com como medio colaborador. 

Sin sacrificar el retorno social de su actividad, desean alcanzar la rentabilidad financiera. En estos momentos la empresa aún tiene pérdidas, pero esperan lograr el punto de equilibrio el próximo año o dentro de dos como mucho. Para ello están pensando, en un plazo de cinco años, en realizar habitualmente proyectos en Madrid y otras ciudades españolas.