Ros Roca encuentra socio

El fabricante de bienes de equipo para la recogida y el transporte de residuos Ros Roca Environment y la compañía Terberg Environmental tienen previsto fusionarse antes de final de año. El resultado de ese proceso de concentración será la firma líder en el mercado de la industria de gestión de desechos. Pero también la vía que ha encontrado la empresa leridana para resolver un momento económico complicado que ha llevado al concurso de acreedores a una de sus filiales, Incryen, que presentó un expediente de regulación de empleo (ERE) para la mayoría de la plantilla. Además, los ingresos de Ros Roca fueron de 62 millones de euros en el 2014, tras un fuerte descenso con respecto al ejercicio anterior y registró pérdidas de explotación de 153.000 euros.

La firma leridana y Terberg hicieron público ayer el anuncio de fusión, que debe aportar "sinergias y mayores oportunidades para abrir el grupo a nuevos mercados productos". La firma holandesa ofrece capitalizar a la española con 30 millones de euros. Aunque la actividad central de su negocio se realiza en el ámbito de la automoción, espera que el trabajo de I+D se pueda aplicar en las áreas de negocio del grupo catalán, del que hasta ahora era proveedor. La mayoría del capital de Ros Roca está en manos de la familia Roca (63,5%). El Grupo March, por medio de Corporación Alba, tiene un 23% y el 14,5% restante pertenece a la aragonesa Tasal.

El nuevo grupo llevará por nombre Terberg Ros Roca y será «líder en el mercado de la gestión integral de residuos. Fabricará chasis especiales, sistemas de elevación y equipos recolectores.

Mayoría holandesa

Terberg Environmental, que tendrá la mayoría tras la fusión, tiene centros productivos en el Reino Unido y los Países Bajos. Es la división medio ambiental del grupo familiar holandés Terberg, dedicado a la fabricación y distribución de vehículos especiales y equipamiento medioambiental. Esta firma no es la única que ha negociado con la empresa leridana, pero si es la que tenía interés por el grupo más allá de la filial británica de Ros Roca, cuyo negocio es el más saneado y con mejores expectativas.

Ros Roca Environment tiene más de medio siglo de actividad. Fue fundada en 1953 en Tàrrega (Lleida) y es una multinacional que centra su actividad en la fabricación y comercialización de bienes de equipo para la recogida de residuos y limpieza urbana. Su plantilla supera los 1.400 tranajadores. Tiene una amplia actividad fuera de España. Sus principales centros de trabajo están situados en el Reino Unido, Alemania, Francia, Brasil, México, Chile y China, además de España.