HISTORIAS MÍNIMAS

Plantillas para ir a la playa

Ergodinámica Clínica se alía con Castell para ofrecer calzado estiloso de mujer con plantilla integrada

Eduardo Sánchez-Osorio y Damián Llorens

Eduardo Sánchez-Osorio y Damián Llorens / periodico

EVA MELÚS/ BARCELONA

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Ergodinámica Clínica, pionera en el estudio de la marcha para detectar patologías, creó hace tres años su propia marca de chanclas con una plantilla personalizada, las ergochanclas. El objetivo era que sus pacientes pudieran continuar su tratamiento en verano, cuando el calzado tiende a ser más relajado. La empresa, con una red de 21 centros, seguía la estela de otras marcas. Sin embargo, la gran respuesta (más de 400 pares vendidos desde el verano de 2014) le ha llevado a llegar a un acuerdo con la empresa menorquina Castell para crear varias líneas de calzado para mujer con una estética joven y de tendencia, desde las modernas ergorromanas que se atan a la pierna, a las ergosandal, perfectas para tomar una copa en un chiringuito sin que el personal sospeche que hay plantilla que apuntale el pie. Solo en los primeros 15 días, la clínica tramitó unos 80 pedidos.

Las inestables sandalias y chanclas del verano era uno de los demonios de los especialistas de la clínica. “Seguramente hemos encontrado un nicho de mercado. La nueva línea ofrece mucho juego, especialmente a las mujeres, que solían abandonar el tratamiento en verano porque no cuentan con un calzado a su gusto, que no dijera a gritos que llevan plantillas”, explica  Damián Llorens, director de márqueting y comunicación de Ergodinámica Clínica.

Llorens asegura que la empresa, fundada a principios de la década de 1970, estudió muy bien con quién aliarse en esta aventura emprendedora para no comprometer el prestigio de la marca. “Tenemos una gran historia detrás y buscábamos una garantía”, añade. "Con Castell, la colaboración ha sido muy buena, tanto durante el medio año en el que desarrollamos técnicamente los diseños, como a nivel de márketing. Al final, hemos logrado un producto que une el gran prestigio de las dos empresas", señala.

La empresa familiar Castell inició su actividad en 1985, pero en sus orígenes hay un antiguo linaje de zapateros. El doctor Miguel Sánchez-Osorio abrió su primer centro en Barcelona en 1973, donde empezó a implementar un método propio basado en el estudio del pie para tratar alteraciones biomecánicas. Para la medicina moderna es algo completamente asumido, pero hasta entonces se estudiaba el pie de forma independiente, sin pensar en su relación con el resto del cuerpo. "Y los pies son muy importantes. Nuestra columna está sujeta por dos pilares y si el apoyo no es bueno, se resienten la espalda, las cervicales y el resto del cuerpo", explica Toni Albite, uno de los especialistas de Ergodinámica Clinica.

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El doctor Eduardo Sánchez-Osorio, hijo del fundador, es el actual director de la empresa, que tiene sus oficinas centrales en el Passeig de la Bonanova de Barcelona. Ergodinámica cuenta con otro centro en la exclusiva calle Serrano de Madrid y un servicio especializado en medicina y traumatología deportiva, el Instituto Metrad, con especialistas del prestigio de Miquel Llobet, uno de los introductores de la artroscopia en el país, o la doctora Ana de la Torre, de los servicios médicos del Getafe.

Entre clientes de Ergodinámica Clínica hay muchos deportistas de élite que quieren aumentar su rendimiento, pero también personas de a pie con pies que les causan problemas. "De alguna manera, somos como los circuitos de Fórmula 1, donde se prueban grandes avances tecnológicos para aplicarlos al resto de vehículos", añade Albite.