Madrid atrae cuatro veces más inversión extranjera que Catalunya

El pulso entre Barcelona y Madrid por hacerse con el proyecto de Eurovegas refleja hasta qué punto las inversiones extranjeras -en este caso, las del magnate Sheldon Adelson- son bienvenidas. Reactivan la economía y crean empleo, algo muy valorado en un país con la tasa de paro superior al 22%. En este ámbito, Eurovegas no es el único frente de batalla. Y, según los datos oficiales, Madrid gana por goleada. De los 22.480 millones de euros invertidos en sociedades productivas en España en el 2011 (descontando la financiera-fiscal, con escaso efecto sobre la actividad y el empleo), más de la mitad (el 55,7%) tuvo como destino la comunidad madrileña. Catalunya, segunda del ranking, captó un volumen cuatro veces inferior (13,4%).

Los datos, correspondientes al Registro de Inversiones Exteriores publicado por el Ministerio de Economía, muestran además que, mientras que las inversiones brutas aumentaron en Madrid casi el 140% respecto al 2010, las de Catalunya cayeron casi el 25% en el mismo periodo. Esto supone un cambio, ya que desde el 2008 Madrid había ido perdiendo importancia relativa en favor de Catalunya.

Los expertos consultados por este diario son cautos a la hora de confirmar si Catalunya pierde posiciones, ya que las cifras pueden llamar a engaño: una gran inversión de una multinacional puede alterar la visión de conjunto, por ejemplo.

SEDE FISCAL / El Govern va más lejos y resta credibilidad a los datos del Registro de Inversiones Exteriores. «Son poco fiables», afirma Joan Josep Berbel, director de Invest in Catalonia, organismo del Departament d'Empresa i Ocupació que promueve inversiones en Catalunya. Según Berbel, las cifras no reflejan la realidad porque indican como destino de las inversiones la comunidad donde están las sedes fiscales de las empresas, cuando a veces se benefician las factorías ubicadas en otros lugares.

Otras razones que cita Berbel para poner en duda las cifras oficiales es que muchas inversiones en Catalunya son de compañías ya instaladas, que no siempre lo comunican. Por ello, Berbel estima que las inversiones productivas en Catalunya fueron muy superiores a los 3.022 millones que dice el ministerio. Según sus cálculos, alcanzó los 5.895,9 millones (239 de los cuales gracias a la acción de Invest in Catalonia) y creó 9.793 empleos directos.

Madrid seguirá con la ventaja de tener la capital de Estado, afirman los expertos. «Empresas de sectores regulados como la energía, las telecomunicaciones y la banca quieren estar cerca del regulador», afirma el profesor de Esade Pere Puig. «Las multinacionales de determinados sectores, mientras tengamos un estado tan centralizado, seguirán escogiendo Madrid», coincide Lluís Lluch, director de la consultora Barcelona Business Landing.

Madrid «no ha tenido tantas barreras para endeudarse», añade Puig, lo que le ha permitido mejorar las infraestructuras. También es «más pragmática» a la hora de favorecer la entrada de nuevas iniciativas, mientras que Catalunya es más exigente, opina el profesor de Esade. Sin embargo, no todo se reduce a estar cerca del Gobierno y a la fiscalidad. «También son importantes la productividad, el acceso a talento, un mercado de consumo próximo interesante, una renta per cápita elevada... y en estos aspectos Catalunya tiene reputación internacional», dice Lluch. En sectores como la química, alimentación, automoción y servicios, Madrid no es competencia, añade Berbel, sino Londres, Berlín y Bruselas. Y gracias al Mobile World Congress y la designación de Barcelona como capital mundial del móvil, las telecomunicaciones son el sector que más proyectos atrae.

Fujitsu, Continental, Tech Data y Accenture han apostado por Catalunya en los últimos meses. Y vendrán más, afirma el director de Invest in Catalonia. El conseller de Empresa, Francesc Xavier Mena, presentó en febrero un plan para captar inversión extranjera por 600 millones hasta el 2014. Este año, se superarán los 200 millones «con toda seguridad», dice Berbel.

INVERSIÓN ESPAÑOLA / El Registro de Inversiones Exteriores también analiza lo que destinan las empresas españolas a otros países. El ministerio destaca los «malos resultados» del 2011, cuando la inversión bruta de las empresas españolas para expandirse en el exterior fue de 25.301 millones, el 11,8% menos que un año antes. Aunque la cifra es superior a la inversión productiva extranjera en España (22.480 millones), la evolución de esta fue mucho mejor al crecer el 85,7%.