El IPC cae al -0,5% por la evolución de alimentos, gasolinas y luz

El índice de precios de consumo (IPC) volvió a situarse en agosto en negativo (-0,5%) por segundo mes consecutivo y marcó la tasa más baja desde octubre del 2009, cuando fue del -0,7%. El Instituto Nacional de Estadística (INE) confirmó ayer el dato que adelantó hace dos semanas, que acentúa la caída de julio (-0,3%) y alimenta el debate sobre la deflación (caída continuada de precios que lleva a los consumidores a retrasar sus decisiones de gasto).

En tasa mensual, el IPC subió en agosto el 0,2% respecto al nivel de julio. Como esta subida fue mayor en el mes del 2013, el resultado es un descenso de la tasa anual, hasta el -0,5%.

La caída del IPC anual se debió al abaratamiento de los carburantes (mientras que en agosto del 2013 subieron), al menor encarecimiento de las frutas y a una subida de la luz inferior a la de agosto del 2013.

De los 12 grupos que integran la estadística del IPC, siete registraron en agosto precios más baratos de en el mismo mes del año anterior. Se trata de los grupos de alimentos, vestido y calzado, menaje, medicina, transporte, comunicaciones y ocio y cultura.

Tras el dato de agosto, Funcas ha rebajado del 0,3% al 0% su previsión de inflación interanual en diciembre del 2014. Frente a esto, el secretario de Estado de Economía, Íñigo Fernández de Mesa, vaticinó que el IPC cerrará el año con un dato «ligeramente positivo» y confió en que las medidas del BCE ayudarán a ello. Según De Mesa esta moderación de los precios está favoreciendo el poder adquisitivo de las rentas y el consumo así como el impulso de las exportaciones.