PLAN DE ACCIÓN DE LA reunión de los líderes mundiales

El G-20 lanza 800 medidas para crecer el 2,1% más hasta el 2018

Un nuevo foro de infraestructuras prevé estimular inversión nueva por 2 billones

El presidente de EEUU, Barack Obama, y los primeros ministros de Australia, Tony Abbott, y Japón, Shinzo Abe, en un momento de la cumbre.

El presidente de EEUU, Barack Obama, y los primeros ministros de Australia, Tony Abbott, y Japón, Shinzo Abe, en un momento de la cumbre.

ROSA MARÍA SÁNCHEZ / MADRID

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Los líderes de las 20 principales economías desarrolladas y emergentes del mundo (G-20) finalizaron ayer su novena cumbre, en la ciudad australiana de Brisbane, con la satisfacción de haber firmado un plan de acción con casi un millar de medidas, 800 de las cuales son nuevas respecto a anteriores cumbres. A este motivo de satisfacción añadió el presidente Mariano Rajoy el de haber comprobado que España ha dejado de ser un «problema» para ser un «ejemplo».

Según los cálculos del Fondo Monetario Internacional (FMI) y de la organización de países desarrollados OCDE, la plena adopción de las medidas acordadas en Brisbane permitiría en estos países un crecimiento adicional de su PIB del 2,1% hasta el 2018, así como la creación de «millones» de puestos de trabajo.

«Ahora, la aplicación de estas medidas es crucial», dijo Christine Lagarde, directora del FMI, el organismo que vigilará su cumplimiento. Afectan a inversión, empleo, comercio y competencia, sobre todo.

La principal novedad reside en el desarrollo de una Iniciativa Global de Infraestructuras (GII) que, según el primer ministro de Australia, Tony Abbott, debe servir para encauzar la necesidad de inversión necesaria hasta el 2030 en todo el mundo (unos 56 billones de euros).

Para ello, el G-20 ha acordado crear lo que se ha denominado como Hub Global de Infraestructuras, una especie de foro mundial que tendrá su sede en Sidney (Australia) cuyo principal cometido será impulsar proyectos, compartir conocimiento, implicar al sector privado y buscar vías de financiación en bancos de desarrollo como el Banco Mundial, que ya se ha comprometido con el proyecto. Según Abbott, el Hub podría ayudar incrementar en 1,6 billones de euros la inversión en infraestructuras globales el 2030.

El presidente de la Unión Europea, Herman van Rompuy, valoró que este foro conecta con el plan de inversión por 300.000 millones de euros que se prevé lanzar en la UE antes de finalizar este año.

En empleo, el G-20 se ha fijado como objetivo reducir la brecha de participación en el trabajo entre hombres y mujeres en un 25% en el 2025 con la incorporación de 100 millones de mujeres al mercado laboral .

SECTOR FINANCIERO

Seis años después del estallido de la crisis financiera mundial y del primer G-20 (2008), el comunicado final de Brisbane relega ahora a un segundo plano los retos del sector. «Los bancos ahora están mejor capitalizados, los mercados de derivados son seguros y los contribuyentes están mejor protegidos frente a la posible quiebra de grandes bancos. Hemos reducido los riesgos de la banca en la sombra», dijo Abbott. «Nuestro objetivo ahora es implementar lo acordado mientras permanecen las alertas ante los nuevos riesgos que puedan surgir».

El Foro de Estabilidad Financiera  (FSB) ha lanzado una propuesta para una mayor recapitalización de las entidades catalogadas como demasiado grandes para caer que debe ser concretada a principios del 2015.

En contra de la expectativa creada por la presidencia australiana, no ha habido grandes avances contra la evasión fiscal. El G-20 renueva su compromiso con el trabajo de la OCDE para que las multinacionales tributen en los países donde obtienen sus beneficios (proyecto BEPS) y promover el intercambio automático de información fiscal entre países.

«Estamos comprometidos a finalizar este trabajo en el 2015, incluyendo la transparencia sobre los acuerdos específicos con contribuyentes, consideradas como prácticas nocivas». La alusión apunta a los acuerdos secretos con multinacionales que están tras el escándalo Luxleaksque atañe al actual presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, como exgobernante de Luxemburgo.