La crisis del euro

Claves para entender las medidas del BCE

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DEPÓSITOS. MENOS REMUNERACIÓN 

¿Tendré que pagar al banco por mis ahorros?

La segunda medida estrella que anunció ayer Mario Draghi son los tipos negativos para los depósitos del BCE. Esta decisión no comportará ningún impacto negativo en los ahorros de los particulares. Es decir, las personas que tengan depósitos en su banco los tendrán remunerados al tipo de interés que decida su entidad financiera. Lógicamente, si los tipos de interés están bajos, los intereses que ofrecen los bancos también lo son.

Sin embargo, la nueva medida tiene que ver tan solo con el dinero que los bancos de la eurozona depositan en el BCE a un día. El banco central paga un tipo de interés a las entidades que le traen su dinero, aunque en la última etapa la tasa ya era del 0%.

Ahora por primera vez en la historia de la moneda europea, los bancos tendrán una penalización del 0,10% por el dinero que lleven al BCE. Con esta medida, la autoridad monetaria persigue empujar a la banca a prestar el dinero en vez de tenerlo guardado en el banco central. Los expertos señalan, sin embargo, que la tasa negativa del 0,10% no es suficientemente disuasoria como para forzar el crédito.

LAS HIPOTECAS. EN MÍNIMOS

¿Cómo me beneficia la bajada de tipos al 0,15%?

Los tipos de interés son la tarifa a la que los bancos obtienen prestado el dinero del BCE e influyen indirectamente en los tipos de interés interbancarios como el euríbor, referencia para la mayoría de las hipotecas. Los tipos de interés han evolucionado a la baja durante toda la crisis financiera y ya estaban en el mínimo histórico del 0,25%. El BCE podría haberlos dejado en el 0%, pero los situó ayer en el 0,15%. Es una bajada con más efecto simbólico que real, porque la diferencia entre el 0,25% y el 0,15% es mínima y los mercados ya estaban convencidos de que se reducirían. Los tipos de interés bajos garantizan que los bancos sigan obteniendo liquidez a bajo precio, aunque, como se ha visto, no han logrado que el crédito llegue a la economía.

La medida anunciada ayer garantiza a los particulares hipotecas bajas durante un largo periodo de tiempo, aunque el euríbor ya se encuentra en mínimos (0,56%) y será difícil que se produzcan rebajas adicionales de este tipo de préstamos. Además, muchas hipotecas están topadas con cláusulas suelo.

CRÉDITO. ESCASEZ DE PRÉSTAMOS

¿Me beneficiaré  de los 400.000 millones?

El manguerazo de 400.000 millones de euros que anunció ayer el BCE para este año está pensado para que llegue a la economía real, a las empresas y a los hogares, pero estos no podrán solicitarlo directamente y dependerán de lo que acaben haciendo los bancos, que se encuentran más pendientes de pasar las pruebas de solvencia europeas el próximo mes de noviembre que de prestar a la economía.

Así, el BCE celebrará dos subastas, en septiembre y diciembre del 2014. Los bancos tendrán derecho a solicitar en estas operaciones el equivalente al 7% de la cantidad total que conforme su cartera de préstamos al sector privado no financiero de la zona euro, excluyendo las hipotecas, a 30 de abril del 2014.  Desde marzo del 2015 a junio del 2016, las entidades podrán solicitar en subastas trimestrales hasta tres veces la cantidad equivalente a su capacidad de crédito neto al sector privado.

Draghi advirtió ayer a los bancos que vigilará el destino de estos fondos para que realmente vayan a parar a la economía. Los expertos creen que a corto plazo el efecto será menor.

MÁS ESTÍMULOS. FUTURO ABIERTO

¿Puede el BCE tomar medidas adicionales?

A Supermario, como conocen a Mario Draghi en los mercados, le gusta dejar a los inversores pendientes de sus movimientos. Ayer, una vez más, dejó la puerta abierta a tomar medidas más drásticas cuando dijo: «No hemos terminado aquí». El presidente del BCE ha reconocido que se ha estudiado una medida denominada QE (quantitative easing), una herramienta de la política monetaria utilizada por los bancos centrales cuando los tipos de interés están en unos niveles muy cercanos a cero y, por tanto, no es posible actuar sobre ellos para aumentar los precios y estimular la economía. En este caso, se busca también incidir sobre la fortaleza del euro, que lastra las exportaciones europeas a la zona dólar.

El QE consiste en que el BCE compra activos financieros (deuda pública u otros) a bancos u otras instituciones financieras privadas. El BCE no entrega directamente dinero a cambio de dichos activos, sino que lo que hace es reconocer un depósito a favor de dichas instituciones. Por tanto, el QE influye sobre la oferta monetaria, aumentándola de forma importante.