Cerca de 5.000 trabajadores de CatalunyaCaixa se manifiestan contra el ERE

Los representantes sindicales vuelven hoy a la negociación con la empresa con las expetativa de que se produzca algún avance

MAX JIMÉNEZ BOTÍAS / Barcelona

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Unos 5.000 trabajadores de CatalunyaCaixa han participado hoy, según los organizadores, en la manifestación convocada por los representantes sindicales en protesta por la falta de avances en la negociación del expediente de regulación de empleo (ERE) que afecta a 2.453 trabajadores de la plantilla y supone el cierre de cerca de 500 oficinas.

El acto de protesta se ha iniciado frente a la delegación del Banco de España en Barcelona y ha discurrido por Vía Laietana hasta la sede de la entidad que está situada en la plaza Antoni Maura. En el acto han participado principalmente trabajadores de Catalunya, pero también han acudido empleados de otros puntos de España, como Valencia y Zaragoza.

La manifestación es uno de los actos reivindicativos de la jornada de huelga que se ha iniciado hoy en la entidad financiera y que se prolongará mañana. Los sindicatos han cifrado el seguimjiento de la huelga en un 95%. Esta mañana menos de 300 terminales --la entidad tiene más de 6.000 trabajadores-- se habían puesto en marcha.

Esta tarde, los representantes sindicales vuelven a reunirse con los negociadores de la empresa con la expectativa de que se produzca algún avance sustancial. Al menos, ese es el mensaje que los representantes que Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) transmitieron el pasado viernes a los técnicos de la Consellería de Empresa i Ocupació, que intentan que el propietario público del banco catalán equipare las condiciones del ajuste a las aplicadas en otras entidades estatales, como Bankia y NCG Banco.

De momento, la empresa ha llegado a promoponer indemnizaciones de 27 días por año trabajado con un tope de 18 mensualidades, pero descarta que el grueso de las bajas se produzcan por vía voluntaria y que afecten a los trabajadores de mayor edad. La empresa lo rechaza porque encarece el coste del ajustes.