Un flojo Espanyol sufre para doblegar al colista

Con una primera parte correcta, un golazo de Abraham y una segunda mitad lamentable, el Espanyol se llevó los tres puntos ante el Córdoba (1-0). A cinco días de la cita decisiva de la Copa ante el Athletic, el cuadro perico sumó un valioso triunfo que le deja a 10 puntos del descenso. La imagen no fue buena, pero el resultado sí. La efectividad local y el escaso talento del rival fueron claves para salir victorioso en un mal partido.

Suerte que ayer visitó Cornellà el colista. No mereció ganar el Espanyol, pero la incompetencia del Córdoba dio alas a los pericos, que deben mejorar su imagen para entrar en la final de Copa. El miércoles visitará Cornellà un Athletic alicaído, pero con calidad. Las ocasiones falladas ayer por los andaluces serían letales si caen en las botas de Aduriz.

ABURRIMIENTO

 Después de la derrota del viernes anterior en Getafe, el Espanyol repetía experiencia en un día sin tradición futbolística. No podía repetir otro fiasco. Suele ser lógico sacar mejores resultados como local que como visitante, pero en el caso perico esa realidad se convierte en una absoluta evidencia. El Espanyol, con 24 puntos en el Power8, tiene cifras de zona europea, solo superado por los seis mejores clubs del torneo.

Con la visita del colista no se esperaba un homenaje al buen fútbol. El Córdoba, el equipo que empezó con el Chapi Ferrer tras un milagroso ascenso, vive en una convulsión constante. En Cornellà mereció el empate pero sufrió su sexta derrota consecutiva pese a la revolución de Miroslav Djukic, un técnico al que no le tiembla el pulso para disparar contra lo que haga falta. Así lo hizo tras el desastre de su equipo en el Camp Nou (5-0) en una arenga que funcionó bien, pero la injusta derrota en el Arcángel (1-2) ante el Madrid dio paso a una caída sin frenos, con juergas nocturnas incluidas y cuatro jugadores expedientados, entre ellos el pichichi Ghilas, al que castigó sin complejos el preparador serbio.

Se jugaba el choque en el horario habitual de la Champions (20.45 horas), pero el partido no tuvo esa etiqueta. La primera parte se resumió en dos tiros a puerta: uno del Córdoba, una falta lanzada por Fede Cartabia despejada por Kiko Casilla (m. 40), y el gol de Abraham (m. 43). El Espanyol volvió a agarrarse al orden y la eficacia para salir adelante.

Antes del gol poca cosa hubo. Apenas una doble oportunidad en un disparo rozando el poste de Arbilla (m. 15) y un cabezazo alto de Abraham (m. 16). El centrocampista dejó en el banquillo a Víctor Sánchez en una apuesta que le salió de maravilla a Sergio González. El barcelonés adelantó a los pericos con un excelente disparo desde la frontal tras un dejada con la cabeza de Caicedo.

LARGUERO ANDALUZ

En casa y por delante en el marcador, el Espanyol afrontaba una segunda parte que debía ser plácida. Pero el guion se giró por completo. El equipo perico exhibió su peor versión, desconectó y sufrió muchísimo ante el colista. Un disparo alto de Sergio García (m. 59) dio paso a minutos de angustia.

Solo la falta de puntería de los cordobeses evitó el desastre. Bebé se convirtió en el mejor amigo de los pericos al tirar por la borda tres ocasiones: una falta rozando el poste (m. 68) y un doble mano a mano ante Casilla (m. 76 y 77). Tampoco faltó un larguero de Crespo (m. 76) en un asedio que milagrosamente se quedó sin premio. El Espanyol se salvó y ya puede pensar en la apasionante cita del miércoles, el partido más importante de los últimos años.