La preparación de una carrera de fondo

42,195 km. El reto del maratón de Barcelona

A nueve semanas de la carrera, los 14.000 inscritos afinan su puesta a punto completando meticulosos y exigentes programas de entrenamiento

Un corredor trota por el frente marítimo de Barcelona, esta semana,  al amanecer.

Un corredor trota por el frente marítimo de Barcelona, esta semana, al amanecer.

JOAN CARLES ARMENGOL
BARCELONA

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Los 14.048 corredores que ayer figuraban inscritos para correr el Zurich Maratón de Barcelona del próximo 17 de marzo están enfrascados ya, sin excepción, en los exigentes y meticulosos planes de entrenamiento que les debe llevar a lograr sus particulares objetivos en la carrera, cada uno a su nivel, más modesto o menos.

Desde los debutantes hasta los más experimentados, desde los profesionales hasta los amateurs más estrictos, todos ellos están siguiendo unos disciplinados planes que les exigen salir a correr de tres a cuatro veces por semana para cubrir, a diferentes ritmos e intensidades, los kilometrajes marcados en esos programas de preparación. Quedan nueve semanas para la cita, las más exigentes en una preparación que todos esos corredores ya han iniciado, como mínimo, hace tres semanas. Los planes más sencillos contemplan esas 12 semanas, mientras que otros se extienden hasta las 14 semanas o incluso más.

En estas páginas publicamos una muestra, un puro ejemplo de los muchos posibles, de un programa destinado a un corredor, hombre de 50 años y ya con cierta experiencia en pruebas de fondo, que quiera bajar de las cinco horas en los 42,195 kilómetros de la prueba más exigente del programa atlético.

La organización de la prueba barcelonesa también está poniendo de su parte para que los participantes bien preparados consigan en Barcelona una buena marca. Los diseñadores del recorrido liman año tras año los recodos del trazado que pueden ralentizar a los corredores. Este año han eliminado una pequeña subida por el paseo de Sant Joan y han fomentado la ida y la vuelta por la Meridiana y la Diagonal (hasta la plaza de las Glòries) -para que los participantes se animen al verse entre sí- para conseguir un recorrido un poco más veloz. La última subida importante se da en el kilómetro 15 (paseo de Gràcia). A partir de ahí, la altimetría es muy moderada, y solo el tramo final, inevitable, en la avenida del Paral·lel para regresar a la avenida de Maria Cristina, pica un poco hacia arriba.

CARRERAS PREVIAS / Los corredores populares tienen tiempo para estudiar ese recorrido y también para completar una preparación basada en la disciplina, el sacrificio, la rutina y unos hábitos que deben seguir si quieren alcanzar sus objetivos. El calendario catalán de carreras populares ayuda, sin embargo, a que la preparación sea más amena, ya que prácticamente cada fin de semana aparece en el calendario una prueba de 10 kilómetros o un medio maratón para ensayar en ellos los ritmos que luego se deben aplicar en la cita grande del 17 de marzo.

La Cursa del Barri de Sant Antoni, la carrera de 10.000 metros más antigua de la ciudad, abre el próximo domingo el carrusel de pruebas preparatorias, con un nuevo récord de inscripción de 4.000 atletas. Superar los topes de participación del año anterior se ha convertido ya en un hábito en Catalunya. Por ejemplo, la Cursa del Nassos del pasado 31 de diciembre alcanzó los 11.000 participantes, y el medio maratón de Granollers (La Mitja, popularmente) del próximo 3 de febrero ha cerrado con 12.000 inscritos, 2.000 más que el año pasado.

Los otros medios maratones de Terrassa, Barcelona (un mes antes del maratón), Montornès y Gavà, junto con el Maratest de Badalona (en distancias intermedias muy útiles), como se ve en el gráfico adjunto, son algunas de las pruebas más adecuadas para preparar la carrera grande barcelonesa, que este año también persigue, como todas, su particular récord de participación.

El Zurich Maratón de Barcelona rozó el año pasado los 20.000 apuntados (19.507), y este año la inscripción está aumentando a razón de casi 100 diarios (ayer estaban en 14.048). Por cierto, hasta alcanzar el dorsal 17.000, el precio será 12 euros más barato que a partir de esa cifra. Hasta el 3 de marzo hay tiempo.