Muy pocos para una gran decisión

El fútbol no siempre es justo. El Valencia jugó infinitamente mejor que el Hércules o el Mallorca en el Camp Nou y, a diferencia de ellos, se fue de vacío. Si fuera seguidor del Valencia, estaría muy orgulloso de mi equipo. Ni un reproche a los míos. Jugando así, gustarás en casa y serás apreciado por los de fuera. ¿Candidato al título? Ya se verá, queda mucho campeonato por delante. ¿Mención especial? Toda y más. Lo fácil es atrincherarte atrás. Lo difícil es salir a por el partido, y más en el Camp Nou. Y el Valencia lo hizo.

El del sábado, para mí, fue uno de los mejores encuentros que he visto en los últimos tiempos. Hubo una parte para cada uno, cierto. Lo marcó el tener o dejar de tener el balón, pero dos equipos jugando más o menos a lo mismo: arriba, muy juntos, presionando, queriendo tener el balón, queriendo abrir el campo por las bandas, utilizando el fuera de juego no como arma defensiva sino como arma ofensiva. ¿Qué logras con ello? Dos cosas: o recuperar más rápido el balón o acabar con el ataque del rival en cuanto busca el pase interior y caen en fuera de juego sus delanteros.

Por calidad, porque tiene elementos para jugar así y porque su entrenador,Unai Emery,es valiente y quiere jugar así pudiendo hacer lo contrario, solo puedes pensar que este Valencia estará arriba. Como el Real Madrid. Futbolísticamente estará lejos de lo visto en el Barça-Valencia, pero si en plena fase de crecimiento ofrece los números que ofrece, es que está en el buen camino.

Marcar un gol no es fácil, y el Madrid lleva 10 en dos partidos. Y detrás, igual o mejor incluso. Tres goles encajados en siete jornadas. Esto será largo, pero si de entrada ya se asegura los resultados, en adelante los blancos serán mejores en cuanto acoplen lo que les queda por acoplar.

Asamblea de socios

Por lo que respecta a las importantes decisiones tomadas en la asamblea de socios compromisarios, mi reflexión es solo una. Y la hago partiendo de la base de que ni soy jurista ni entiendo de números. Si por ley había que tocar todo lo que se tocó, adelante. Sin embargo, no entiendo que la decisión social más importante de la historia del club esté en manos de 1.093 socios. Personas que, como yo, no entienden de asuntos financieros de este calado. Y si no entiendes, ¿cómo vas a emitir un juicio, ya sea a favor o en contra?

Hablamos de un club con miles y miles se socios (creo que son más de 170.000), seguramente con millones de seguidores en todo el mundo, y todo queda en manos de unos pocos socios compromisarios que no saben, porque no es lo suyo, si las cuentas de unos y otros son buenas, malas o si hay un punto medio en todo ello.

Si desglosas los 1.093 votos, te das cuenta de que no eran pocos los que estaban perdidos. Entre votos en blanco (113) y los que, pudiendo hacerlo, no votaron (74), resulta que el 17% de los que fueron, escucharon y reflexionaron al respecto acabaron por sacar la conclusión para mí más lógica: no sé qué votar. Yo puedo tener mucha idea de fútbol, de márketing deportivo, de la importancia del club en lo social, pero no tengo ni idea de números y menos cuando oyes y lees que las auditorías dependen de cómo se lean o se interpreten.

Sistema alternativo

¡Ostras! Si lo que se tenía que decidir, con unsío con unno, ocurría por primera vez en la historia, es que era muy grave. Y por grave entiendo importante. ¿No había otra forma? Ya sé que una asamblea tiene los compromisarios que tiene y van los que van, nunca todos. Que este es el organismo que rige al club y que le hace distinto a las sociedades anónimas. Pero insisto en lo expuesto al inicio: si no entiendes de asuntos financieros, yo el primero, difícilmente podrás emitir un juicio a favor o en contra. Y esesío esenoiba mucho más allá de la aprobación de un presupuesto u otro.

A mí me importa el fútbol y el prestigio de la entidad. Lo primero, a pesar de los pesares, a pesar de oír solo lo malo y no lo bueno, lo tienes cimentado; lo segundo está en peligro. Como para mí la situación también es nueva, solo puedo intuir que con jueces, recursos y contrarrecursos de por medio, la situación se alargará durante mucho tiempo, quizá años.

El prestigio, en juego

¿Cuál será el prestigio del club azulgrana dentro de unos años? No lo sé, pero seguramente peor. ¿Se tenía que llegar a ello? Lo desconozco, porque no es mi terreno. Como el de la mayoría, por no decir todos, de los poco más de mil socios compromisarios que decidieron en los dos minutos más importantes de la historia de la entidad barcelonista.