El fiscal pide casi 5 años para el 'casteller' de Can Vies

La Fiscalía ha solicitado este martes cuatro años y ocho meses de prisión para Sergi Rubia, miembro de los Castellers de Barcelona, que fue detenido el 28 de mayo pasado tras una manifestación en Sants en protesta por el derribo del centro de Can Vies. El imputado ha declarado en el juicio que se ha celebrado en la Ciutat de la Justícia de Barcelona que acudió a una cacerolada con un amigo y que no participó en ningún altercado ni tampoco quemó contenedores, tal y como se le acusa.

Sin embargo, dos agentes de la Guardia Urbana que participaron en su arresto han mantenido que vieron al acusado mover el citado contenedor y que lo detuvieron inmediatamente después de que actuara, tras quedarse rezagado respecto a un grupo de alborotadores que se habían organizado para levantar barricadas en las calles de Sants.

Según la Fiscalía Sergi Rubia sobre las 20.00 horas del 28 de mayo con ocasión de la protesta no autorizada convocada por diferentes colectivos en la plaza de Sants el acusado, "en compañía de unas 800 personas más, provocaron graves disturbios". La acusación pública ha modificado levemente su imputación alegando durante la vista que al acusado solo se le puede atribuir la quema de un contenedor y no de varios como exponía en su primer escrito de acusación.

A parte de los dos guardias urbanos han declarados varios testigos. Entre ellos un amigo que iba con él que ha cuestionado la versión policial y un vecino de la calle donde se produjo la detención, que asegura que en su zona no se quemó ningún contendor.

El de Sergi Rubia, que permaneció en prisión preventiva durante más de 20 días tras su detención, es el primer juicio que se celebra en Barcelona por los incidentes en las movilizaciones contra el desalojo de Can Vies.

A las 10.00 de la mañana se ha concentrado un grupo de 'castellers' en apoyo al acusado y han levantado un castillo ante la Ciutat de la Justícia.