Fallo de planificación en una arteria del Eixample recién renovada

El 40% de los árboles nuevos de Sant Joan mueren a los 4 meses

Un hombre pasa la mañana entre la densa vegetación del paseo, ayer.

Un hombre pasa la mañana entre la densa vegetación del paseo, ayer.

CARLOS MÁRQUEZ DANIEL
BARCELONA

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Ser árbol en una gran ciudad no es fácil. Sobrevivir a la intemperie, con la polución, la orina de perro, las colillas, los envoltorios de bollería o los culos de botella que acaban junto a sus raíces, requiere cierta fortaleza y cuidados constantes. Barcelona, merced a su clima mediterráneo, es una de las capitales con mayor concentración de plantas callejeras. Pero las desgracias ocurren, y esta semana se ha vivido una tragedia a escala vegetal en el paseo de Sant Joan. El renovado tramo entre la plaza de Tetuan y el Arc de Triomf acaba de ver cómo el ayuntamiento arrancaba, el martes, 59 ejemplares de la especiekoelreuteria,más conocida como árbol de los farolillos o jabonero chino. Lo curioso del caso es que fueron plantados hace solo cuatro meses. Y la suerte del caso es que la obra está en garantía y que no pagará el ciudadano, sino la empresa a la que se adjudicó el proyecto (FCC).

A principios de año, cuando este diario hacía un seguimiento constante de esta obra inaugurada en abril, los vecinos alertaban sobre el mantenimiento de la densa vegetación que se les venía encima con la ampliación de las aceras. Temían que las hileras de hierba, los árboles nuevos, los arbustos junto a la calzada y los plátanos centenarios fueran demasiado trabajo para el ya de por sí atareado equipo de Parques y Jardines de Barcelona. Charo López, portavoz de la asociación Eixample Sostenible, fue de las que más recelaba a pesar de estar encantada con la idea de renovar esta arteria que une Ciutat Vella con Gràcia a través del Eixample. «Siempre hemos tenido dudas sobre si los árboles tienen suficiente espacio y tierra para poder sobrevivir. Y que ahora queden esos 59 agujeros sin árbol nos hace ser un poco más desconfiados. Huele un poco a chapuza», comparte.

A LA ESPERA DE LA 'AUTOPSIA' / Sea una chapuza, un error de previsión, una especie demasiado enclenque o un riego que no da más de sí, lo cierto es que este tramo de Sant Joan tiene ahora 59 alcorques vacíos de un total de 152 nuevos árboles que se plantaron en abril. O sea, un 38,8% de lo que se sembró ha muerto. ¿Y qué dice laautopsia? ¿Qué ha podido causar semejante pérdida de vidas vegetales? Un portavoz municipal sostiene que el ayuntamiento hizo constar en el mismo momento de recibir lasllavesde la obra que los árboles «no estaban en buen estado» y, aunque lo lógico hubiera sido no dar elokal trabajo y exigir ejemplares con una esperanza de vida más óptima, se optó por dejar pasar el tiempo porque no suponía «riesgo alguno» mantenerlos en el paseo hasta que la naturaleza dijera basta ya. Si no hay novedad, los nuevos jaboneros chinos llegarán en otoño, época en la que la ciudad se dedica al replantado de calles y jardines.

Charo explica que a principios de mes llamó al distrito para comentar un problema con el riego. Según cuenta, en el tramo entre Casp y Ausiàs March no salía agua y las plantas y la hierba estaban más secas de lo normal. En Parques y Jardines le dijeron que lo mirarían, que se ponían a ello. Al cabo de unos días le aseguraron que el problema estaba resuelto, que se habían dado cuenta de que los grifos, colocados bajo tierra y de complicado acceso, estaban cerrados. La portavoz de Eixample Sostenible también les advirtió sobre los árboles enfermos, pero en este tema no obtuvo una respuesta concreta hasta que ayer se enteró de que los retiraron el martes, unos días después de que el consistorio marcara con un punto naranja los troncos muertos. «A nadie le gusta tener los agujeros ahí, pero si en unos pocos meses está solucionado, tampoco es para pedir la dimisión de nadie. El problema es que la gente empezará a usarlos como contenedor de basura», teme.

TRABAJO CON SEGURO / Quizás lo único bueno del asunto es que la reposición no costará un duro al ciudadano. Todas las obras públicas disponen de un año de garantía, lo que incluye cualquier inconveniencia en las plantas, como es el caso. Así las cosas, será la empresa FCC la que se ocupará de que el paseo de Sant Joan recupere toda la heroica alineación de árboles.