Homenaje a Cortázar

La Casa América Catalunya está tomada, hasta el 24 de octubre, por Julio Cortázar. Por las primeras ediciones de sus libros, sus cartas y postales (algunas inéditas), por sus fotos, dedicatorias, su propia voz y objetos tan personales como su máquina de escribir, su pipa y el carnet de conducir que le expidió la Prefactura de Policía de París en 1958. Es parte del material que integra la exposición Cortázar en casa, que rinde homenaje al escritor argentino en el centenario de su nacimiento.

A través del concepto del colaje, una técnica muy utilizada por el escritor en algunas de sus obras, la muestra invita a conocer al Cortázar más íntimo y en sus distintas facetas: la de profesor, melómano, literato y hombre comprometido con diferentes causas sociales. También subraya la intensa relación que mantuvo con Barcelona y que comenzó cuando apenas tenía 2 años.

Justo así arranca la exposición, con una imagen del niño Julio y su hermana Lia tomada en Barcelona, donde la familia Cortázar pasó parte de la primera guerra mundial hasta que, en 1918, regresaron a Argentina.

LA VOZ / Comisariada por Carles Álvarez, editor del Cortázar más inédito, y avalada por Aurora Bernárdez, viuda, albacea y heredera universal de su obras, la muestra incluye audios donde el autor de Rayuela lee sus propios textos y, uno en concreto en el que pronuncia la primera clase que impartió en la universidad californiana de Berkely en 1980.

Cortázar en casa exhibe también una pieza de arte sonoro interactiva creada expresamente para la ocasión por los músicos latinoamericanos David Machado y Hegel Pedroza. Concebida a a partir del relato de Cortázar La vuelta al piano de Thelonious Monk, esta pieza permite acceder a frases del cuento, recrea paisajes sonoros del ambiente noctámbulo vinculado al jazz y reproduce fragmentos de la obra de Monk.