O y su ilusión por el cine

Que el título no confunda. Esta O nada tiene que ver con la protagonista de la novela erótica por antonomasia antes de la aparición de Christian Grey y sus 50 sombras. Aquí también hay pasión, sí, pero muy confesable. De cine. Y es tanta que arrancó de joven y sigue en marcha. Cuando de niño a Óscar Fernández Orengo le daban la paga, la invertía viendo películas, así que cuando obtuvo su primer DNI no dudó en firmar: 'O y su ilusión por el cine'. 

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Ahora su rúbrica se supone estándar pero el anhelo por el séptimo arte sigue inalterable. Vean si no: ya lleva 230 directores españoles retratados en lo que es el archivo de cineastas del país más extenso que existe. Tiene a todos los grandes menos a tres: Alejandro Amenábar, Gracia Querejeta y Nacho Vigalondo. Vaya, pues, desde aquí, una llamada a la generosidad del esquivo trío para enfrentarse a la cámara de Fernández Orengo (San Sebastián, 1971). Se le resisten, sí, pero su paciencia nada tiene que envidiar a la de Job. No desiste. Durante 15 años persiguió, en vano, al escurridizo Víctor Erice. La recompensa ha llegado hace poco. Y ahora su fotografía tomada en el Jardín Botánico de Madrid, donde el director de 'El espíritu de la colmena' lee y escribe guiones, cuelga junto a las de 41 colegas en la sala de exposiciones de la Filmoteca. 

BLANCO Y NEGRO PANORÁMICO

En blanco y negro y en formato panorámico como todos los retratos que  Fernández Orengo realiza con su Hasselblad X-Pan para lo que él llama "el proyecto de su vida". O sea, el megaarchivo de realizadores españoles. Un trabajo que empezó en el 2001 y casi por casualidad. Acababa de hacer el cartel de 'El mar' de Agustí Villaronga y acababa de estudiar fotografía. Arte al que llegó tras su "rotundo fracaso por intentar ser director de cine", afirma. Así que cámara en mano le pidió posado al realizador mallorquín. Accedió. Y lo hizo en la bañera. "La mirada a través del agua me parecía tan inquietante como sus películas", justifica Fernández Orengo.

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El espacio no es baladí. El entorno tiene que significar algo para el retratado. "Refuerza la idea de fotografía documental", apunta el autor. Muchos, como Villaronga, escogen su casa. Lo que representa una gran oportunidad para el visitante 'voyeur' de la exposición. Permite entrar en intimidad ajena. Ahí van unos ejemplos: en el salón de Kike Maíllo luce una estantería por él diseñada; Julio Medem, otro que puso a prueba la perseverancia de Fernández Orengo, tiene una escalera imposible en la terraza; a Rosa Vergés la rodean modernismo y sombreros, y a José Antonio Salgot, libros y cuadros. 

De todos, solo hay uno que no pudo escoger paisaje: Antonio Banderas. Vino impuesto. Pero la ocasión lo merecía. El malagueño no es fácil de encontrar. Y Fernández Orengo no es fácil de amedrentar. De manera que en una visita relámpago del ex de Melanie Griffith a la Filmoteca, el fotógrafo panorámico lo tenía todo a punto para sortear todas las negativas y cazar a Banderas 'in situ. Hubo impedimentos, muchos, pero la Hasselblad despertó la curiosidad del actor-director. Le pilló. y ahora su imagen es uno de los trofeos de la exposición. 

RECONOCIDOS Y OLVIDADOS

La muestra es la cuarta del proyecto y expone solo fotografías inéditas, Villaronga al margen. La selección suma directores reconocidos y también realizadores olvidados: "Me interesa rescatar la memoria", sostiene. Pocos se acuerdan de La Cuadrilla, aquí retratados como Gilbert & George, pero su 'Justino, un asesino de la tercera edad' arrasó en taquilla hace ya algunos años. Y menos gloria queda para José María Berzosa, gran amigo de Buñuel y creador de buenos documentales, o para Àngel García del Val, autor de 'Cada ver es'.

Es un 'work in progress'. Fernández Orengo va fotografiando a los nuevos directores, Carlos Marqués-Marcet ya está en el archivo; y va rescatando a los relegados al ostracismo: "Calculo que me quedan unos 80 cuyos nombres no deben conocer ni los críticos pero que han hecho por lo menos una película", asegura. Y es que como dice su amigo Isaki Lacuesta: “"Si eres director de cine y Óscar no te ha retratado, no existes".