Al cole, pero solo a jugar

Volver al cole durante las vacaciones de Navidad, pero solo para jugar. Es lo que propone el Ayuntamiento de Barcelona, a través del Instituto Municipal de Educación, que ofrece a todo el mundo la posibilidad de disfrutar de patios escolares abiertos en todos los distritos de la ciudad como espacios de uso público. Un total de 16 escuelas participan en la iniciativa, que incluye 55 actividades de dinamización gratuitas.

Sin batas, sin libros y sin profesores, los 16 patios abren sus puertas a partir de hoy y hasta el 7 de enero, último día de las vacaciones escolares. Familias, niños y adolescentes pueden utilizar sus instalaciones para jugar. Todos los días, menos el 25 de diciembre y el 1 de enero. Todos ellos, además, contarán con actividades de dinamización educativa de tipo deportivo, cultural y artístico. Estas actividades serán también gratuitas y abiertas a todo el mundo. Asimismo, en cada patio habrá monitores que velarán por el buen uso del espacio.

De los 16 patios abiertos, un total de 14 tienen horario de mañana, de lunes a domingo, de 11.00 a 14.00 horas. Son la Escola Alexandre Galí (Barceloneta), la Ferran Sunyer (Eixample), la Barrufet (Sants), el Institut Ausiàs March (Les Corts), el Menéndez y Pelayo (Sarrià), la escuela Sedeta (Gràcia), los colegios Pau Casals y Jovellanos (Horta-Guinardó), Antaviana y Calderón de la Barca (Nou Barris), Pompeu Fabra y Baró de Viver (Sant Andreu) y la escuela Miralletes y el Institut Bernat Metge (Sant Martí). Los dos centros restantes -la Escola Ramon Llull (Eixample) y el instituto Lluís Vives (Sants)- abren por las tardes, también de lunes a domingo, entre las 16.00 y las 19.00 h.

El programa municipal Patis Escolars Oberts al Barri no es nuevo, aunque este año cuenta con menos escuelas que en el 2012, cuando participaron 20 patios con 70 actividades. Funciona también los fines de semana en temporada escolar para favorecer actividades variadas y de calidad a los niños y jóvenes, optimizar los recursos educativos y contribuir a conciliar la vida laboral y familiar. El objetivo, según Gerard Ardanuy, concejal de Educación, es «conseguir espacios donde se potencie simultáneamente la vertiente social y educativa».