Macrorredada esta noche contra la prostitución en los alrededores del Camp Nou

Agentes de los Mossos d'Esquadra, la Guardia Urbana y la Policía Nacional han realizado esta noche una macrorredada en el entorno del Camp Nou de Barcelona contra la prostitución, identificando a decenas de prostitutas y travestis, así como algunos clientes, y trasladando a dependencias de la policía a decenas de ellas.

Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana han dividido la zona en dos subsectores y han establecido un punto de control de alcoholemia y drogas en la calle de Gregorio Marañón. El jefe del dispositivo, el inspector de los Mossos d'Esquadra Josep Saumell, ha explicado en declaraciones a los periodistas que se trata de un dispositivo "preventivo" que se hace tres o cuatro veces al año y que se ha escogido la zona del Camp Nou por ser un lugar habitual donde se ejerce "la actividad sexual remunerada". No obstante, ha puntualizado que no están en esta zona porque haya más denuncias.

Ha explicado que entre otros objetivos está detectar el consumo de estupefacientes, intervenir armas, personas que incumplen la ordenanza de civismo y determinar si hay implicados en alguna actividad ilícita.

Respecto a los proxenetas, ha dicho que en un solo caso han detectado a un coche en el que podía viajar uno de ellos, aunque finalmente no han podido atraparle. En la Avenida Diagonal con la calle de Alfambra, la Guardia Urbana ha pedido la documentación a dos prostitutas rumanas, mayores de edad, a las que se ha denunciado por tener sprays de defensa personal, lo que comporta una multa de 300 euros.

Acción recurrente

Una de ellas, en declaraciones a Europa Press y con un buen español, ha asegurado no tener a nadie que le obligue y que trabaja habitualmente en la zona. La prostituta, que dice que hace dos años que vive en España, ha explicado que la policía las molesta "de vez en cuando".

Según uno de los agentes, pueden llegar a ganar unos 6.000 euros semanales, por lo que es muy difícil que lo dejen, aunque se intenta dar opciones por si deciden abandonar esta práctica. Cerca de allí, en la calle de González Pablo, han detectado a dos prostitutas en un coche con un cliente, al que han multado con 375 euros. Las chicas, que han afirmado ser de Ghana y de Jamaica, han asegurado a Europa Press no saber por qué se las traslada a dependencias policiales.

Ambas han sido conducidas a dependencias de la Policía Nacional porque carecían de documentación. Todas las mujeres indocumentadas han sido trasladadas a un punto de control policial en el mismo barrio, desplegado por los tres cuerpos policiales y donde se les identifica y, en los casos necesarios, se les aplica la ley de extranjería.