Mathieu vuelve a entrenarse 27 días después de ser operado

La plantilla del Barça celebra un almuerzo conjunto para preparar el final de curso

Mathieu, en el entrenamiento del Barça de este miércoles.

Mathieu, en el entrenamiento del Barça de este miércoles. / periodico

JOAN DOMÈNECH / BARCELONA

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Veintisiete días después de ser operado de la rodilla, Jérémy Mathieu volvió a entrenarse con el grupo. El aliciente del final de temporada con la posibilidad de conquistar dos títulos más, y el añadido de la Eurocopa de Francia, su país, han estimulado al defensa para volver cuanto antes al trabajo. Los pronósticos médicos  ya aventuraban, sin embargo, que podría reaparecer antes de que acabara la competición.

La enfermería del Barça sigue vaciándose, aunque Mathieu todavía no ha recibido el alta. Aún tardará en tenerla. Las previsiones más optimistas de su probable reaparición estimaban una ausencia mínima de entre seis y ocho semanas. Solo ha cumplido tres y media. Su regreso al césped, sin embargo, no fue pleno ni trabajó con el resto de sus compañeros. Tuvo, al menos, la satisfacción de participar en los rondos. Como los jóvenes Borja López, Cámara y Mújica, del Barça B.

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También participó Mathieu en la terapia de grupo posterior encaminada a preparar el desenlace de la temporada en la que andan en juego la Liga y al Copa del Rey en tres semanas. La plantilla se reunió para almorzar en uno de sus restaurantes fetiche, la Masia Can Ferran (Sant Quirze del Vallès). A la comida asistieron todos los componentes del vestuario.

LA CITA HABITUAL

La cita es habitual. Hace dos temporadas, durante el mandato de Tata Martino, hubo no menos tres asados (más una cena), con el doble propósito de la confraternización y la despedida de la temporada mientras recuperaba y perdía opciones de conquistar la Liga en las últimas jornadas. Al final la perdió en la última, en casa frente al Atlético, con el tercer empate consecutivo tras los cosechados ante el Getafe y en Elche. La Copa también se perdió un mes antes ante el Madrid.

Mientras los dos rivales sobreviven en la Champions, Luis Enrique solo puede preparar la Liga. El calendario lleva al Barça al campo del Betis este sábado. Mathieu no irá. Vermaelen y Sandro, los otros integrantes de la enfermería, difícilmente irán. Aunque recibieran el alta de sus respectivas lesiones musculares.

El defensa belga se lesionó en el sóleo de la pierna derecha el 11 de abril. El club no estableció un periodo de baja atendiendo a los antecedentes del futbolista, propenso a los percances musculares. Sandro cayó el 11 de marzo, y el mes y medio de baja que se le pronosticó se cumple esta semana.

LA OPCIÓN MÁS CORTA

Mathieu anda más avanzado de los plazos previstos. Se sometió a una artroscopia el 31 de marzo por una rotura en el menisco interno de la rodilla derecha que se había producido dos días antes jugando con la selección francesa ante Rusia.

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Mathieu tenía dos opciones en el quirófano: la extirpación de la parte fragmentada o la sutura. Optó por la primera, ya que la segunda alargaba la rehabilitación más tiempo y quedaba completamente descartado de poder reaparecer este curso y, sobre todo, le apartaba de la Eurocopa (empieza el 10 de junio).

Los médicos aventuraron que, en el mejor de los casos, estaría ausente de los terrenos de juego entre seis y ocho semanas. Mathieu llegaría muy justo a la última jornada de Liga (14 de mayo) y a la final de Copa (22 de mayo). Aún así, tendría la oposición de Bartra, Piqué y Mascherano, los otros centrales de la plantilla, para disponer de minutos con los que recuperar el ritmo.