Las 'estelades', sin veto pero a criterio de los controles de acceso al Calderón

La Delegación del Gobierno de Madrid creó hace un año una fuerte polémica, con protestas de la Generalitat y el Barça, al prohibir la entrada de 'estelades' en la final de la Copa del Rey que, como ahora, se celebró en el estadio Vicente Calderón. Al cabo de unos días, un juez de lo contencioso administrativo de la capital de España levantó el veto al considerar que estas banderas no incitaban a la violencia. Hubo 'estelades' y también pitada al himno español por parte de los seguidores azulgranas, en un partido disputado ante el Sevilla.

En esta ocasión, tal como se escenificó el jueves en la reunión de seguridad celebrada en Madrid, las 'estelades' no han estado sobre la mesa y aunque no han sido permitidas expresamente, tampoco han sido prohibidas por lo que, en todo caso, quedará la presencia a criterio de los controladores de acceso a la grada del Calderón pero, en cualquier caso, no han estado vetadas.

SIN ENTRADAS

Los seguidores del Barça (se espera unos 13.000, puesto que este viernes ya no quedaban entradas a la venta) dispondrán de una zona de 'fans' ubicada curiosamente en el Matadero de Madrid, en el paseo Chopera, 14, con servicio de autobuses lanzadora. Los aficionados del Alavés, que pueden ser mayoría en el estadio, serán ubicados durante el día en el parque Cuña Verde. Ambas zonas estarán abiertas entre las 10 y las 19 horas.

El dispositivo de seguridad será excepcional con un total de 2.500 efectivos velando en la final, entre policías nacionales, municipales y vigilancia privada. Los camiones tendrán prohibida la circulación en las calles y avenidas próximas al Vicente Calderón. El rey Felipe VI presidirá el partido desde el palco.