Gana Obama

<span style="color: #ff0000"><strong>ESPECIAL: La muerte de Bin Laden</strong></span>

La profunda herida abierta en la sociedad norteamericana tras el 11-S podrá cicatrizar una década después

Numerosos estadounidenses han salido a la calle, en la avenida de Pensilvania, a las afueras de la Casa Blanca, para celebrar la caída de Bin Laden.

Numerosos estadounidenses han salido a la calle, en la avenida de Pensilvania, a las afueras de la Casa Blanca, para celebrar la caída de Bin Laden. / BS ed AA

MARTA LÓPEZ / Barcelona

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La muerte de Osama bin Laden es una excelente noticia para Estados Unidos, para la moral de los estadounidenses pero sobre todo para Barack Obama, que en un momento muy difícil de su presidencia se apunta el mayor éxito en seguridad nacional en una década. Hace mucho tiempo que los estadounidenses esperaban este anuncio, que va a permitir que profunda herida que dejó abierta el 11-S en la sociedad norteamericana empiece a cicatrizar 10 años después.

Las muestras de júbilo popular, de emoción y patriotismo que las televisiones nos hacen llegar a estas horas de las calles de las principales ciudades de EEUU demuestran lo pendiente que estaba todavía esta asignatura para los estadounidenses pese a que el nombre de Bin Laden había caído de los discursos presidenciales. Y ha sido Obama, cuya política exterior ha sido permanentemente cuestionada por sus adversarios por la falta de resultados, quien la ha saldado.

"Se ha hecho justicia"

Su predecesor, George Bush, lo intentó sin éxito durante casi ocho años. "No importa lo que cueste, se ha hecho justicia", ha declarado el hombre que tras la huella de Bin Laden embarcó a su país en dos guerras que todavía perduran.

Falta todavía un año y medio para las elecciones presidenciales. La economía, el paro y el precio de los combustibles todavía darán mucho que hablar y los sectores más radicales del Partido Republicano seguirán desenterrando el hacha de guerra, pero la presidencia de Obama ha dado en las últimas horas un vuelco.

Solo hay que ver a estas horas a los estadounidenses en las calles. Al Qaeda podrá seguir haciendo daño pero Obama ha devuelto el orgullo a un país necesitado.