Volver a pasear tranquilamente por Barcelona 'sin morir' en el intento

Recuerdo cuando se iba por Barcelona con la cara alta y con tranquilidad, paseando, observando y conversado de forma relajada. Ahora no. Ahora antes de salir del portal tienes que hacer dos cosas: mirar a izquierda y derecha y donde pisas (por si alguna bicicleta aparece y se te lleva por delante) y abajo (por si algún el incívico con su perro ha dejado el regalo de turno).

Y así será durante todo el paseo, en vez de disfrutar mirando los edificios, plazas, fuentes, etc, tienes que ir permanentemente mirando abajo, para sortear las innumerables deposiciones que han dejado algunos -bastantes- dueños de perros.

Pero aún hay más: al mismo tiempo tienes que estar atento a los corredores e imprudentes ciclistas que te pasan a centímetros. Pocos, pero a unas velocidades que si cambiaras de dirección o señalaras algo, se te podrían llevar por delante, o al menos un brazo. Por lo que solicitamos a quien proceda, que regule, multe, presione y persiga a favor de la gente de a pie. Estas cosas que impiden, sobre todo a mayores y niños, disfrutar y estar relajado en la calle. Y háganlo de forma contundente.