La ministra Salgado dice que los mercados distinguen entre Grecia y España

La ministra de Economía española, Elena Salgado, ha asegurado que no está preocupada por el efecto de contagio que pueda tener sobre la deuda española la falta de acuerdo para el desembolso del próximo tramo de ayuda a Grecia y ha dicho que los mercados "distinguen perfectamente" entre ambos países.

"Evidentemente, hubiera sido deseable que hubiéramos llegado a un acuerdo más inmediato en el día de ayer [domingo] pero yo creo que los mercados distinguen perfectamente, saben que estamos haciendo las reformas que nuestro país necesita y que estamos llevando a cabo la consolidación fiscal", ha indicado Salgado.

También ha restado importancia a los rumores de adelanto electoral, que ha considerado desmentidos por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el resto del Ejecutivo.

La vicepresidenta Salgado ha participado hoy en la segunda jornada de reunión de ministros europeos de Finanzas en Luxemburgo, después de que el Eurogrupo de este domingo finalizara de madrugada y tras siete horas de negociaciones, sin acuerdo sobre el próximo desembolso de ayuda a Grecia.

Ha explicado que "el hecho de que el primer ministro heleno haya anunciado que se va a someter a una votación" de confianza en el Parlamento de su país ha influido en el retraso de la decisión sobre el desembolso del quinto tramo de ayuda a Grecia, pues "es bueno" esperar a conocer ese resultado antes de entregar el dinero de la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Aplazamiento del desembolso

Asimismo, Salgado ha dicho no creer que el aplazamiento del desembolso "tenga consecuencias" para el país mediterráneo, pues "para Grecia es suficiente que (el dinero) esté disponible a partir del mes de julio porque es en agosto cuando tiene esa amortización importante de 6.000 millones".

Salgado confía en que a comienzos de julio se logre desbloquear ese desembolso y también avanzar en la definición del segundo programa de rescate de Grecia, "al menos, sobre la definición de la cantidad y de las condiciones".

La prima de riesgo baja

La prima de riesgo de España, que se mide con el diferencial entre el bono nacional a diez años y el alemán del mismo plazo, eludía a mediodía la evolución alcista del resto de países periféricos y se reducía hasta 268 puntos básicos, desde los 272 que alcanzaba en algún momento de la sesión.

La falta de acuerdo de los ministros de Finanzas de la zona del euro sobre los plazos para desbloquear 12.000 millones de euros de ayuda a Grecia empujaban al alza el riesgo país de Grecia, Irlanda y Portugal, así como los de otros países cuyas finanzas no han sido cuestionadas.

La rentabilidad del bono español a 10 años se situaba hoy en torno al 5,6 %, su nivel más alto desde septiembre de 2010, en tanto que la del bono germano permanecía estable por debajo del 3%. Por el contrario, las primas de riesgo de países como Grecia, Irlanda, Portugal e incluso Italia experimentaban importantes avances.