PROBLEMA DE SALUBRIDAD

Sacrificadas más de 900 palomas de la plaza de Catalunya de Barcelona

El ayuntamiento dice que suponían un riesgo sanitario para la Feria de Consumo Responsable que se celebra en ese enclave

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Antonio Madridejos

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La Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB) capturó y sacrificó a principios de mes 923 palomas en la plaza de Catalunya por el riesgo sanitario que suponían para la Feria de Consumo Responsable que allí se celebra, con numerosos puestos de productos alimentarios frescos sin envasar, según ha informado el organismo municipal.

Hace justo un año, el ayuntamiento se comprometió a no sacrificar nuevos ejemplares y optar por medios de control demográfico menos cruentos, especialmente el pienso anticonceptivo. Fuentes de la ASPB insisten, no obstante, en que se trata de una excepción puntual y que está avalada por los servicios municipales de seguridad alimentaria y salud ambiental. "La gran densidad de palomas es incompatible con la celebración de un mercado de esas características", explican.

Pregunta del PDeCat

El ayuntamiento ha salido así al paso de una pregunta formulada por el concejal Jordi Martí, del grupo municipal del PDeCat, acerca de quién dio la orden de proceder a la captura y eliminación de las palomas y si ello es compatible con el método ético de control de aves establecido en el mandato anterior.

La oenegé Corazón de Paloma también ha criticado la medida y la ha calificado de "cruel matanza". En un comunicado, ha asegurado que se trata de un método "ilegal" e "ineficaz" porque provoca "a corto plazo un aumento de la población" de palomas.

Peligrosas bacterias

Por el mismo problema de insalubridad, este año se intervino también sobre una colonia de palomas, aunque de dimensiones más reducidas, en las cercanías del mercado de la Boqueria. En aquella ocasión, los animales fueron capturados vivos y ello permitió realizar un análisis de contaminación por patógenos. Y el resultado más llamativo es que un "número considerable" de los ejemplares estaban contaminados con las bacterias Salmonella Campylobacter, además de diversos parásitos.

El procedimiento empleado con las palomas de plaza Catalunya es el mismo que se aplicaba antes de la prohibición y que aún está en vigor en otras ciudades españolas: la captura con red, el transporte en jaulas y el sacrificio por inhalación de gas. Curiosamente, la plaza de Catalunya es -oficialmente, por motivo de tradición- el único emplazamiento de Barcelona en que se puede alimentar a las palomas. En el resto, quien lo haga se expone a una multa.