DESPLOME EN EL CAMPOSANTO
BCN identifica a 41 difuntos de los 140 nichos derrumbados en Montjuïc
El Ayuntamiento de Barcelona ya ha identificado a 41 de los difuntos que reposaban en los 140 nichos que se derrumbaron el pasado viernes Se trata de los que llevaban menos tiempo enterrados, lógicamente, más fáciles de identificar. De los 41, 28 fallecidos conservaban el cuerpo entero. Muchos estaban todavía en la caja en la que fueron sepultados, otra facilidad.
Es el caso de la madre de Maria Dolors Cecilia, la primera afectada en denunciar lo sucedido en el camposanto. La mujer fue enterrada de nuevo el domingo, y su hija protestó porque no se hubiera procedido a ello delante de ella. En su caso, los responsables del cementerio le informaron de que la habían encontrado, y con nombre en la caja, lo que en principio no deja espacio a dudas. Este martes, Cecilia seguía lamentando no haber asistido al traslado, si bien también aceptaba el argumento que le dieron en Montjuïc: hubiera sido una experiencia traumática. Cecilia sigue buscando a más afectados: no renuncia a una reclamación legal por lo sucedido. Cree que el origen del desplome es la falta de un mantenimiento adecuado: “Lo quiero hacer para que no vuelva a pasar”
112 desplomados, 28 demolidos
Fuentes de Cementiris de Barcelona precisan que no se derrumbaron los 140 nichos. El viernes a las siete de la mañana el desplome se llevó 112 por delante. Otros 28, que estaban junto al bloque que se precipitó, fueron vaciados y demolidos por seguridad. En estos casos tampoco habrá problema de identificación.
Uno de los principales problemas está siendo encontrar a los titulares de los nichos. Algunos están muertos, y enterrados en otro sitio. De otros se tienen datos antiguos, en muchos casos teléfonos fijos y direcciones que pueden estar obsoletos.
70 familias identificadas
De los 140 casos, se ha podido contactar ya con las familias de los enterrados en 70 de las sepulturas caídas. Este miércoles, Cementiris de Barcelona empezará a enviar cartas certificadas. En los casos en los que no haya respuesta, se buscará información en el padrón.
Según responsables de la empresa, nunca había sucedido algo parecido al derrumbe del viernes y la preocupación de los afectados que van llegando al cementerio para comprobar si sus parientes siguen enterrados donde debieran es notable. Este miércoles, por ejemplo, un hombre logró sortear al vigilante de seguridad que vigilaba la zona del derrumbe para poder acercarse a la tumba de un familiar. Pese a la excitación del momento, el desenlace fue positivo: todo estaba en su sitio.
Identificación incorrecta
Lo que empieza a cundir es la preocupación de algunas de las familias por que no se identifique correctamente los restos humanos, lo que daría pie a que acaben enterrados en una sepultura equivocada. Incluso sin ver cuerpos ni restos, la experiencia que están pasando los familiares resulta traumática.
Es el caso de Cristina García. Su padre fue enterrado hace dos años en la zona afectada, en el espacio en el que ya estaban los padres del finado y una hermana. Como el resto de la familia prefería optar por otras opciones para la eternidad, cedió la mitad del nicho a una prima, copropietaria. Como el resto de allegados de los que habían sido sepultados en los últimos dos años, la prima recibió la llamada del ayuntamiento el viernes. No contestó y la volvieron a llamar el martes y le dijeron que el padre de su prima había sido trasladado a un nicho provisional. Pero este miércoles le han contado a García que fue un error, que su padre no ha sido localizado.
Ella, como Cecilia, es partidaria de una acción legal colectiva para pedir responsabilidades: “Nos van a dar saquitos y a saber quién está dentro”.
Mientras siguen las labores de desescombro, ahora empezará el trabajo de los especialistas. Dos antropólogas analizaran los restos a partir de este miércoles. De entrada, separando huesos de mujer de los de hombre. Cementiris de Barcelona confía en que los nichos de la parte más baja, que quedaron enterrados por los restos del desplome, se mantengan en buen estado, incluso enteros.
El grupo Demòcrata critica el silencio del gobierno municipal sobre lo sucedido
El grupo Demòcrata ha lamentado este martes que el gobierno de Ada Colau<strong> guarde silencio sobre el derrumbe de nichos de Montjuïc.</strong> La concejala <strong>Sònia Recasens </strong>ha reclamado “sensibilidad y proximidad” a los responsables del consistorio y ha expresado su temor de que no se estén aplicando los protocolos necesarios para asegurar un trato adecuado a los restos humanos que han quedado mezclados entre los escombros. Recasens ha enviado una carta al concejal de Presidencia, Eloi Badia, para pedir la convocatoria urgente de un consejo de administración extraordinario de Cementiris de Barcelona. Recasens también ha preguntado si es cierto que se está trasladando cadáveres sin avisar a sus familias.
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