ENTREVISTA YOTELE

Anne Igartiburu: "Me gustaría hacer algo más que una entradilla de 20 segundos"

Hablamos con la presentadora que volverá a ponerse al frente de la gala 'Inocente, inocente' antes de conducir la retransmisión de las Campanadas por 15º año consecutivo

Anne Igartiburu

Anne Igartiburu / TVE

Redacción Yotele

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Anne Igartiburu volverá a ser una de las caras visibles de la solidaridad en este 28 de diciembre. La presentadora conducirá junto a Juanma Iturriaga, Jacob Petrus y Carolina Casado la gala 'Inocente, inocente' en La 1. Antonio Carmona, Lorenzo Caprile, Edurne, Lydia Valentín y Antonio José serán algunas de las víctimas de estas cámaras ocultas que este año buscan recaudar fondos para ayudar a los niños hospitalizados y sus familia. YOTELE habló con Anne Igartiburu sobre el especial 'Inocente, inocente', entre otros asuntos como las campanadas de TVE o sus deseos para el 2020.

¿Qué representa para ti gala ‘Inocente, inocente’? ¿Cómo la vives tú?

Es la excusa perfecta para pensar en la solidaridad. En España somos muy solidarios. Tiene 6 millones de voluntarios. Somos un país más comprometido por las circunstancias que vivimos a nivel histórico y el que más personas acoge en sus casas en Europa. Las jóvenes generaciones nos están demostrando que somos uno.

Cuando hacía las galas FAO, recaudábamos dos millones de euros. Cuando miraba a la cámara, por dentro, me sentía emocionada por ser el puente entre lo que estaba pasando y el espectador. Quiero pensar en positivo. Quiero celebrar esto  y que no se nos olvide que somos trozos de pequeños cristales que si se juntan nos podemos reflejar todos en ellos. Vivimos la posibilidad de tener menos y ser más. 

¿Te hicieron alguna veces una inocentada?

Sí, y caí como una tonta. Me fui a cenar con una amiga y se levanta un caballero de una pareja de jubilados que estaban sentados en la mesa de al lado. Nos pidió un anillo para pedirle matrimonio a la señora y yo le di mi brillante que me compré con todos mis ahorros, aunque no sea la pera. Lo pone en la caja, ella la abre y no había nada. Él dice que se tiene que ir porque la había rechazado y yo se lo pido de vuelta.

Este año, Lorenzo Caprile será uno de los protagonistas de las cámaras ocultas de la gala. ¿Te ha hecho especial ilusión que fuese él?

Claro. Es un genio. Tiene esa vehemencia de locura cuando hace falta. Es muy tierno, generoso y extrovertido y le vamos a ver cayendo como un niño grande.

Él será el diseñador de tu traje en la retransmisión de las Campanadas. ¿Qué nos puedes adelantar sobre él?

Es rojo, brillante, manga larga, escote precioso y muy cómodo. Dentro de que estoy al aire libre y tengo que estar abrigada…

En cada Nochevieja, realizas un guiño a algún fin o causa benéfica. Este año, ¿a qué dedicarás ese gesto?

A la agenda 2030 para el compromiso medioambiental. Con todo lo que estamos viviendo, creo que es importante rendir un pequeño homenaje teniendo algo que lo represente. También haré otro guiño a la igualdad y al romper con ese techo de cristal a través de Malas Madres. Hay dos mujeres importantes que me prestarán algo. Ha habido años en los que Rafa Nadal, Margarita Salas, Nuria Espert, Pablo Alborán me dieron algo. Estoy moviendo hilo, pero una de ellas es una de las artistas de este año.

¿Preparas de alguna manera especial ese día?

Suelo correr la San Silvestre antes. Han adelantado la salida y también la citación para estar en la Puerta del Sol desde hace unos años porque, desde los atentados que hubo en Europa, se cierra un poco antes, así que ya veremos. Normalmente, la organización de la carrera me deja ponerme delante para salir antes. Los 10.000 metros los corro cómoda en una hora y cuarto. Si no me da tiempo, salgo a correr a las cinco, me pego una ducha y pongo rumbo hacia la Puerta del Sol. Ya ahí me enfundo con el vestido y al lío.

Roberto Leal ha desvelado que come con Alberto Chicote y Cristina Pardo el día de Nochevieja. ¿Te lo han propuesto a ti también? 

Sí, pero no he podido porque estoy en casa o voy a correr. 

Pero, ¿tienes contacto con el resto de presentadores?

Sí. De hecho, en ese portal, están todos los presentadores. Es muy chulo porque nos encontramos todos. Lo hacemos todos los años. Por ejemplo, Carlos Sobera que ha estado de compañero mío en TVE y luego ha estado en Antena 3. Somos amigos y muy bien.

¿Sigues poniéndote nerviosa?

No es que no me ponga nerviosa, es que no me lo permito. Es algo que yo sé que si me pongo así, puedo perder el control, y ese día cae sobre mí la retransmisión. He aprendido a disfrutar y a estar en lo que estoy. Cuando estás ahí, sabes que tienes que mirar a tu compañero, cogerle de la mano e ir por todas y disfrutar. Son muchas horas de directo las que llevo. Más de 6.500 entregas de ‘Corazón’, galas de Eurovisión, ‘Mira quién baila’, ‘Telepasión’, las galas ‘Inocente, Inocente’ o de la FAO... 

¿Te acuerdas de la primera vez?

Sí. 

¿Ahí estabas nerviosa?

No porque con Ramón García había trabajado mucho en ETB. Había hecho radio con él... Nos miramos y nos entendemos bien. No le quiero quitar mérito a esto, pero yo creo que esto es estar delante de la cámara y disfrutar. 

En la retransmisión de las Campanadas de TVE, no se ha vuelto a repetirse un error como el de Marisa Naranjo…

También se aprende de los errores. No es por justificarla, pero sí la quiero justificar porque cuando hay tanto ruido… Le puede pasar a cualquiera. Ese primer sonido de campanadas solo se da una vez y tienes que estar muy pendiente y presente en lo que estás y que no se te escape nada. No se oye nada. Ni bajar el carrillón.

¿Qué le pides a 2020?

Sentido común. 

¿Y profesionalmente? A muchos les gustaría verte presentando un prime time…

Siempre me lo preguntan. A mí también.

¿Tú eres de pedir?

No. Cuando ha habido programas importantes en la casa, me he dejado caer, pero creo que saben que estoy bien en ‘Corazón’, en un horario cómodo... Pero claro que quiero hacer más cosas: trabajar con emociones, hacer programas cercanos en los que puedas trabajar las emociones de las personas y acompañarles en la toma de decisiones importantes... Tengo 50 años y lo veo con otra visión con la que llegué a la casa. Este año cumplo 25 años en TVE. Llegué haciendo ‘El imperdible’ en La 2.

¿Un prime time en directo te gustaría?

Sí, o cosas así puntales que yo también pueda desarrollar y hablar algo más que una entradilla de 20 segundos. Que está bien, que no me quejo porque tenemos buena audiencia, un horario fantástico y estoy en La 1, pero me apetece.

Tú que eres buena comunicadora y tienes muchos años de carrera. ¿Te has planteado presentar una idea a la cadena?

Sí. He planteado cosas, pero ya vendrán formatos. De hecho, ya se están barruntando cosas para el año que viene. Son ideas mías, pero que la está llevando una productora. Sé ponerme delante de una cámara y contar historias. A ver qué pasa. 

‘Corazón’ ha sufrido, además, una revolución este verano… 

Ha habido un cambio. Creo que el hecho de que Rufino (Sánchez) se haya puesto al frente del programa, que es de nuestro equipo de redacción, ha hecho que la planteamiento sea distinto, el tratamiento de las noticias. Siempre con rigor, pero hacía falta hacer más actividad en redes sociales, hacernos más eco sin tapujos ni pudor sobre lo que los famosos contestaban. Es darle otra vidilla y ha estado bien. Creo hemos hecho bien. 

Siempre has dicho que eres muy consumidora de televisión internacional, ¿qué visto que se pueda y te gustaría trasladar a España?

Me sigue alucinando Ellen DeGeneres. Me parece la gran comunicadora, la que hace de espejo de lo que pasa en la calle, hace espectáculo, tiene sentido del humor, tiene compromiso, es una tía muy ágil y se trabaja el directo. 

Luego hay un programa que lo presenta una fantástica coach que se llama Mel Robbins. Ella hace un programa que acompaña a las personas y les hace ver los cambios que pueden hacer a través de sus propios recursos. El poder de la televisión está ahí: en acercar la emoción, en directos, sin tapujos y que llegue también a través de las redes sociales. 

¿Te verías como Ellen?

Eso lo hace Ellen DeGeneres y Eva Hache y se acabó. Son mujeres que tienen muchos recursos y posibilidades. 

¿Continúas formándote como coach?

Sí. Eso es interminable. Lo llevo bien. Estoy trabajando en la gestión de las emociones y de la identidad de cada uno, en oratoria… Me gusta mucho. No puedo trabajar todo lo que quisiera, pero me formo con los mejores y me lo paso bien. 

¿Y esa parte te gustaría llevarla a la televisión?

Sí. De hecho, es una filosofía de vida también. 

¿Cómo descubriste esta faceta?

Llegué al coaching para conciliar persona y personaje en esa situación de qué hacer para estar más tranquila. Los que me conocen desde hace años lo han notado. 

¿Qué consumes en televisión?

Veo mucho ‘First Dates’. Me gusta el tratamiento de cómo se conocen dos personas y lo diferentes que somos todos y cómo soñamos con despertarnos al lado de alguien que nos dé vidilla. Creo que eso es el motor de la vida. Me parece un reflejo de la vida bien hecho, bien editado, que me imagino que tendrá un límite y que nos cansaremos algún día, pero que me gusta mucho. También consumo serie. Estoy encantada con ‘Fleabag’ y me lo veo y me lo reveo. Soy fan número uno de la ficción.

Y como actriz, ¿te ha surgido algún proyecto?

Más en Euskadi, lugar dónde inicié mi carrera de actriz. Allí he hecho series, películas... Para el año que viene, hay un proyecto de teatro que creo que va a salir y me imagino que en enero o febrero dirán algo. A ver qué pasa. 

¿Nos puedes dar algún detalle de ese proyecto?

Es una comedia de mujeres, muy al uso y, si encajo los ensayos por las tardes y la pequeña gira, igual lo hago. En las tablas, como en los viejos tiempos. El teatro fue mi escuela y tengo ganas. A ver qué pasa.