Un puente en Holanda para que las ardillas puedan cruzar la carretera

El país tiene 600 pasos elevados o subterráneos para que la fauna salvaje no sea atropellada

Una de las ardillas, usando el puente

Una de las ardillas, usando el puente / Ayuntamiento de La Haya

Joan Lluís Ferrer

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Las autopistas y carreteras, así como otras obras públicas, trocean el territorio y fragmentan el hábitat de las especies. Una vía de circulación que atraviese un bosque o cualquier otro paraje natural se convierte en una trinchera insalvable para un sinfín de especies (salvo las aves), que no tienen más remedio que permanecer confinadas en uno de los dos lados de esa frontera infranqueable. Dado que la única posibilidad es cruzar esa carretera, millones de animales al año mueren atropellados en el mundo. Sin embargo, en países como Holanda o Alemania se actúa pensando en ello. Así, en La Haya (Países Bajos) las ardillas ya cruzan un puente construido expresamente para ellas para salvar una carretera.

Imagen del puente del bosque de La Haya

Imagen del puente del bosque de La Haya / Ayuntamiento de La Haya

En 2012 el Ayuntamiento de La Haya construyó este puente, con una inversión de 150.000 euros, para permitir que las ardillas pudieran pasar desde el bosque Haagse Bos hasta la finca Clingendael, hábitat de centenares de estos pequeños mamíferos, sin necesidad de cruzar la carretera que separa ambos parajes.

Sin embargo, el proyecto amenazó con convertirse en fracaso porque han pasado nada menos que diez años antes de que estas criaturas se decidieran a usarlo. De hecho, la polémica envolvió al Ayuntamiento, objeto de críticas por lo que muchos consideraban como un derroche de dinero público.

Pero, finalmente, el puente está logrando su objetivo. Ardillas (y también martas) cruzaron en 2021 más de 400 veces el puente, según ha confirmado el Ayuntamiento. En concreto, lo usaron 263 ardillas y 170 martas.

En un comunicado, la dirigente ecologista local Esther Vogelaar afirmó que “ya se puede hablar de un gran éxito”, porque las ardillas “finalmente saben dónde encontrar el puente”.

Curiosamente, las dos especies no suelen usar el puente al mismo tiempo, puesto que la marta es un depredador y la ardilla es una de sus presas. “Las imágenes muestran que las ardillas usan el puente sobre todo durante el día y las martas durante la noche”, añadió Vogelaar.

600 pasos para la fauna en Holanda

Ahora bien, este puente no es sino uno más de los muchos que Holanda tiene construidos en todo su territorio para permitir el libre tráfico de la fauna salvaje a través de autopistas y otras vías de comunicación.

Un paso para fauna salvaje sobre una autopista

Un paso para fauna salvaje sobre una autopista / Agencias

La mortalidad de animales por atropello es uno de los impactos más conocidos de las grandes infraestructuras de transporte. Para algunas especies amenazadas, como el emblemático lince ibérico del sur de España y Portugal, representa hoy en día la principal causa de muerte, con el 80% de los casos. En Flandes, el 40% de los tejones muere cada año en las carreteras.

En Holanda, hay cinco veces más carreteras que en España, con lo que problema es mayor que en nuestro país. Por ello, y para conectar adecuadamente los hábitats, la red viaria holandesa cuenta con 600 pasos para fauna, utilizados para jabalíes, ciervos, tejones, corzos y todo tipo de animales terrestres. Según datos oficiales, únicamente en una de sus autopistas, la A-50, pasaron más de 5.000 ciervos y jabalíes en un solo año. La eficacia, pues, está demostrada.

Paso para fauna en Alemania

Paso para fauna en Alemania / Agencias

Muchos de estos pasos no son simples pasarelas o pequeños puentes como el de las ardillas del bosque de La Haya, sino verdaderas rampas de hormigón recubiertas de vegetación y tierra, con decenas de metros de anchura, para favorecer el paso de la fauna desde un lado a otro de la vía. En otros casos, se trata de pasos subterráneos.

En Norteamérica destaca el caso de la autopista transcanadiense, que atraviesa el parque nacional de Banff, en Alberta. A su paso por esta zona protegida, la autopista tiene 41 puntos de paso para fauna salvaje, tanto elevados como subterráneos, que en 20 años ha sido utilizado por todo tipo de mamíferos, que los han atravesado en 200.000 ocasiones.

31 pasos para cangrejos rojos en Australia

Otro de los más conocidos es el puente para el cangrejo rojo de la isla Navidad en Australia. Estos cangrejos viven en el bosque pero se reproducen en el mar, hasta donde se deplazan para procrear cada año. Antes muchos de ellos morían aplastados por los coches que circulaban por las carreteras cercanas. Sin embargo, el gobierno construyó 31 pasos subterráneos, 20 km de barreras y un curioso y llamativo puente elevado para que los cangrejos pudieran cruzar con tranquilidad.

paso subterráneo para el cangrejo rojo

paso subterráneo para el cangrejo rojo / Agencias

En España, se trata de un sistema muy poco implantado aún. En el parque nacional de Doñana se han creado algunos de estos pasos para favorecer la seguridad del lince ibérico, dado que los atropellos son precisamente una de las principales causas de mortalidad de esta especie en peligro.

Francia, Alemania, Nueva Zelanda, Brasil, Finlandia, Japón o Argentina son otros de los países con pasos verdes para animales, que evitan al año miles de muertes por atropello. Este tipo de accidentes no solo ponen en peligro la vida de los animales, sino la de los propios conductores, especialmente cuando se trata de animales de gran tamaño, que al impactar contra un vehículo pueden poner en riesgo la vida de sus ocupantes.