'Pasapalabra' frena a Óscar en directo y se lo deja claro: "Las prisas no son buenas…"

Óscar Díaz, actual concursante de 'Pasapalabra', está pasando por una mala racha en los últimos días del programa y, muy a su pesar, ya se va familiarizando con la temida silla azul. Este martes ha acumulado hasta cuatro errores en el rosco final, algunos de ellos por los 'acelerones' que mete el concursante cuando se ve por detrás de Moisés, su eterno rival, que hace unas semanas tuvo que ausentarse del concurso debido a un problema médico.

Intenta imitar la tirada de Moisés

En dicho duelo final, Moisés hizo una gran primera vuelta de 18 aciertos y ningún fallo que, parece, pusieron nervioso a su adversario. Óscar, ante esta situación, decidió meter una marcha más para intentar igualar o superar a su rival. Lo que este no imaginaba es que, después de tantos programas, la tensión y la velocidad iban a jugarle una mala pasada.

Antes de su gran metedura de pata, tuvo casi un fallo: su empeño en aumentar el ritmo le hacían pasar palabra en la letra 'P', seguidamente empezar a pronunciar la palabra que tenía pensada para esa letra y asustarse por si no había pasado aún palabra: "Po...P...¡he pasado palabra antes!", a lo que Roberto Leal le daba la razón, "Has pasado palabra, por lo tanto, no pasa nada, ¿vale?, son dos aciertos", añadía el presentador, intentando calmarlo y pasando al juego con Moisés.

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Después de este tenso momento, y muy lejos de frenar su velocidad, Óscar continuó al mismo ritmo: jugadas rápidas y con el tiempo justo de reacción. ¿El resultado? Cuatro fallos que perpetuaron esta mala racha de sus últimos programas.

Falla por adelantarse a Roberto Leal

Sin lugar a dudas, el peor de sus fallos fue el primero de todos. Cuando Óscar parecía tener la marcha atascada en sexta y los frenos rotos, en su segunda vuelta decidió no escuchar de nuevo el enunciado dictado por Roberto Leal, a quien interrumpió con su respuesta: "Zafar". Pero, aunque muy cerca, la respuesta correcta era "zafarse": "Escaparse o esconderse para evitar un encuentro o riesgo, zafarse", explicaba el presentador.

Óscar, incrédulo por su gran fallo de comprensión o memoria (quizás una segunda escucha le hubiese venido genial para reparar en su fallo antes de pronunciarlo), ya solo podía admitir su error y ser sincero con la audiencia: "Las prisas no son buenas", añadió.

Triunfa la precaución

Moisés, por su parte, fue precavido y decidió dejar correr el tiempo al cometer su segundo error y ver que su contrincante ya acumulaba tres. Esta vez, como muchas otras, mantenerse seguro ha sido la mejor opción y ha dado la victoria al riojano, acumulando 1.200 euros más y enviando a Óscar, de nuevo, a la silla azul.

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