Estreno en Atresplayer

‘El enigma Nadiuska’, un juguete (sexual) roto y un MeToo español

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El enigma Nadiuska

El enigma Nadiuska

Inés Álvarez

Inés Álvarez

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Fue una actriz que hizo aumentar la recaudación en el cine español de la Transición con 16 películas en tres años, la más fotografiada de 1975, la primera que enseñó los pechos en una revista, la primera famosa que apareció en la portada de la revista ‘Interviú’, la mujer más deseada... Todo un icono sexual que vio el cielo y descendió a los infiernos. Pero ¿qué hizo que una mujer con tal éxito y un caché de un millón de pesetas acabara arruinada, viviendo en la calle y encerrada en un psiquiátrico desde hace 20 años? De intentar dar respuesta a esas incógnitas se encarga, como si de un 'true crime' se tratase, la periodista Valeria Vegas en la docuserie ‘El enigma Nadiuska’, que se estrenará pronto en La Sexta (ahora la emite Atresplayer). ”Fue más que una actriz, fue un fenómeno social”, asegura.

De origen ruso y alemán, aunque siempre planeó un halo de misterio sobre sus orígenes, la actriz aterrizó en la industria cinematográfica española en plena época del destape y ayudada por sus magnéticos ojos azules y un físico espectacular pronto acabó acaparando proyectos en los que debía enseñarlo (aunque nunca de cintura para abajo). Pero aunque llegó a lo más alto en ese género, y, como la define José Sacristán, era "muy curranta", no logró salir de ese encasillamiento. Como tantas otras, aunque ella fuera la reina. “En aquel momento no se le puso en valor. Como era muy guapa no debía de actuar bien. Es una actriz de belleza. Porque es un género la belleza en sí misma”, dice Vegas, la periodista que ha hecho ese trabajo de investigación, autora de ‘¡Digo! Ni santa ni puta’, en el que se basó la serie ‘Veneno’, también de Atresplayer. 

Y llega un momento que, cuando ya es una gran estrella y millonaria (“las actrices que más caché tenían en España eran Concha Velasco, Ana Belén y ella", apunta Vegas), cuando lo tenía todo, ese juguete se rompe. A ello contribuyeron los hombres que conoció, entre los que destacó Damián Rabal (hermano de Paco, el actor), un mánager controlador que creé esa imagen misteriosa y glamurosa de la actriz. Él fue quien la alzó a lo más alto y el que la hundió cuando quiso volar. Contando que su nacionalidad la había conseguido casándose en secreto con un marginal y que su currículum anterior era mentira. “La destruyó. La tenía como amante , y su señora en casa, y cuando se cansó de ser su amante y se fue con otro, se rebotó. La casó él y casualmente cuando rompen, se destapa”. 

No obstante, ella no fue la única que sufrió los abusos de un mánager, un productor o un actor. En el documental aparecen estrellas del destape como Jenny Lada, Sara Mora, Ivonne Sentís, Perla Cristal, Sandra Alberti y Silvia Aguilar, otros juguetes rotos que se atreven a denunciar los abusos, aunque sin dar nombres. Una especie de MeToo español. “Tenía muy claro que hacía falta que fueran actrices que obviamente habían vivido ese momento tan crucial de España, la Transición, pero que fueran mujeres valientes. Y la valentía te la da no estar dentro de la industria ya. Igual no fueron la reina como Nadiuska, la primera, pero estaban ahí. Y se fueron o la industria las echó”. Una de ellas incluso cuenta que en una película fue violada por un actor. “Y era un actor conocido”, solo desvela.

Trofeo de cazadores

Y entre esos hombres aparece el donjuán, el cazador, oficial de este país, Juan Carlos I, que, dicen las malas lenguas, acabó sustituyéndola por Bárbara Rey. No hay pruebas, porque a diferencia de la protagonista de 'Una vida Bárbara', no las guardó. “Cuando el río suena, agua lleva. A la mujer más deseada la podían ver como un trofeo de caza”, sostiene la periodista. Y a partir de ahí dijo vivir amenazada. ¿Alguien la quería hacer callar o era producto de su esquizofrenia? “Una cosa es su salud mental, pero hay un germen, igual viene por algo”. La salud mental. Otro aspecto en el que Nadiuska fue pionera al hablar de ello cuando nadie lo hacía. Aunque nadie la escuchó: “Nos planteamos lo de Britney Spears, hace dos años se suicidó Verónica Forqué... En cambio, Nadiuska la vemos hablando en los 80 y los 90 de esto y se pitorrean de ella. En los años 90 dio titulares diciendo que se quería suicidar y al día siguiente como si nada hubiera pasado”, lamenta.

Valeria Vegas, autora de la docuserie de Atresplayer 'El enigma Nadiuska'

Valeria Vegas, autora de la docuserie de Atresplayer 'El enigma Nadiuska' / Atresmedia

Tanta tragedia tiene un final no feliz, pero sí en paz. “Con lo duro que son los dos primeros episodios, el tercero es un alivio.Ccuando empecé a producir no sabía cómo iba a acabar. Porque yo sabía que estaba viva, aunque 8 de cada 10 personas con las que hablaba pensaban que estaba muerta. Como lleva 20 años fuera de circulación…”. Una vez descubierto su paradero, tentada por lo valioso que sería conocer la historia de su propia voz, barajó entrevistarla. “Pero le podría haber perjudicado. Sentí que había que protegerla. Me habría encantado, pero si el documental es reparador, tiene que serlo en todos los sentidos. No había que exponerla como a un cervatillo", concluye. 

A Vegas le gustaría que la Generación Z la conociera con el documental: "Si tienen la curiosidad, fliparían. Porque era nuestra Marilyn Monroe española", asegura.