Las mejores alcaldías se ganan en la cama

Qué hermoso ejemplo de elección de alcalde nos ha dado la localidad de Las Inviernas, municipio de 63 habitantes de Guadalajara. El reportero Luis Troya (Liarla Pardo, La Sexta) ha descubierto que allí los candidatos eran dos: José Luis (PP) y María Isabel (PSOE). Y resulta que ambos están casados, un virtuoso matrimonio que dura ya 17 años. ¡Ahh! Aún así, luchaban encarnizadamente para hacerse con la vara del mando municipal. Una cosa bárbara. Pero el día de la votación y recuento, y a falta de un voto nada más –el del propio José Luis– estaban prácticamente empatados. Y surgió entonces una maravilla resaltable, políticamente insólita, muy rara, pero de una ternura deliciosa y muy humana. José Luis, en lugar de votarse a él mismo, votó a su esposa, y por lo tanto salió elegida ella, la primera alcaldesa socialista de Las Inviernas en 47 años.

¡Ahh! El suceso ha corrido como la pólvora por toda la España invertebrada. El reportero Troya, subyugado, quiso saber cuál habia sido el detonante, la chispa, que habíaa hecho cambiar el voto a José Luis en favor de su esposa y contrincante. Y halló la respuesta tumbándose, junto a ellos, en su glorioso lecho matrimonial. ¡Ahh! Al parecer fue tanta la pasión que vivieron en esa cama la noche anterior a la jornada electoral, que José Luis, en un rapto de amor colosal, le regaló la alcaldía a su esposa, 'la rojilla’, como cariñosamente la llama.

Excuso decirles que el cabreo de los barones del PP de la provincia de Guadalajara es grande. Pero visto el suceso  por la tele, esta renuncia de José Luís adquiere una dimensión extraordinaria. Solo comparable a aquello de Eduardo VIII de Inglaterra que, puesto a tener que elegir entre ceñirse la corona o ceñir el delicado talle de la norteamericana Wallis Simpson, eligió a la norteamericana y mandó la corona a freír espárragos.

Lo ocurrido en Las Inviernas debería ser meditado por la clase política municipal. Les falta amor. Las trincheras televisivas tampoco invitan a la fraternidad. El sábado, en El Palmar de Troya FAQS (TV-3) el resumen de Barcelona fue, primero, imagen de Ada Colau envuelta entre insultos de un grupo vociferante. O sea, ¿veis? ¡no la quiere nadie! Segunda imagen, Joaquim Forn dirigiéndose al consistorio. No discuto que saquen a Forn. Solo digo que algún trocito del parlamento de Ada, la alcaldesa, tampoco hubiera sobrado.