Educación

Las universidades privadas catalanas exigirán la prueba de aptitud en los estudios de magisterio para pasar a segundo

El Consejo Interuniversitario de Catalunya llegó el viernes a un acuerdo para que todas las facultades de Educación exijan la Prueba de Aptitud Personal (PAP)

Más del 40% de los aspirantes han suspendido la prueba para estudiar magisterio en Catalunya

Estudiantes preparándose para la selectividad en una biblioteca de Barcelona, el curso pasado.

Estudiantes preparándose para la selectividad en una biblioteca de Barcelona, el curso pasado. / RICARD CUGAT

Helena López

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Tras la polémica por los preocupantes malos resultados –más del 40% de los aspirantes han suspendido este curso la Prueba de Aptitud Personal (PAP) para estudiar los grados en Educación Infantil y Educación Primaria– y después de conocerse hace algunas semanas que las universidades privadas no realizarían este año la prueba la prueba –es decir, abrían las puertas a ese 40% de aspirantes suspendidos–, la Conselleria d'Universitats logró el viernes un acuerdo con los rectores de las cuatro universidades privadas catalanas para reintroducir las PAP, aunque no en el momento de acceder a la facultad, como ocurría durante los primeros años del examen, entre 2017 y 2022, sino antes de empezar segundo, según ha avanzado este lunes la página web de educación superior en Catalunya UnPortal, y ha confirmado la conselleria de Universitats a este diario.

Por su parte, las universidades públicas y la UOC continuarán pidiendo al alumnado haber superado la prueba antes de la matrícula, como hasta ahora.

El acuerdo se selló en la reunión que la Junta del Consejo Interuniversitario de Catalunya (CIC), organismo formado por el Govern y las 12 universidades públicas y privadas.

La conselleria, eso sí, ha destacado que el acuerdo del CIC es "transitorio", ya que en el marco del Programa de Mejora e Innovación de la Formación de Maestros "se sigue trabajando en nuevas propuestas para el acceso a los grados de Educación". A partir del acuerdo, la Ramon Llull dejará de aplicar la PAP que había diseñado y que sus estudiantes podían superar a lo largo de la carrera. Precisamente esta universidad fue la primera que en 2022 pidió a la Agència per a la Qualitat del Sistema Universitari Català (AQU) y al Consell d'Universitats que les permitieran aceptar estudiantes de Educación que no hubieran superado el examen, solicitud que fue aprobada. Este año se sumaron la UIC y la de Vic.

"Habilidades mínimas"

De los 4.754 estudiantes que se presentaron este mes de abril a las PAP para acceder a los grados de Educación Infantil y Educación Primaria en Catalunya, han aprobado solo 2.707: un 56,94%. El resto, más de 2.000 aspirantes, han sido declarados "no aptos" en esta prueba, instaurada en el año 2017 para demostrar que los aspirantes a futuros docentes contaban tanto de una base de conocimientos teóricos como "de unas mínimas habilidades prácticas a la hora de tratar con niños".

El curso pasado, tras conocerse los resultados de las pruebas de 2023 -algo peores todavía que los del 2024, con solo un 54% de aptos-, el vicedecano de la Facultad de Educación de la UB, Enric Prats, señalaba que "los resultados demuestran que las pruebas funcionan", y defendía que, a diferencia de la selectividad, la PAP es una prueba que filtra sin preparación previa a los que quieren estudiar para maestro. Los estudiantes que llegan a la selectividad ya han pasado un proceso de selección, que es aprobar el bachillerato.

"El contenido de la PAP es más o menos de cuarto de ESO, pero su desarrollo es más abierto, más creativo. Son preguntas que no te las puedes estudiar la semana antes", defendía entonces Prats, quien añadía que "no sería justo pedir contenidos de bachillerato, ya que eso sí penalizaría a los alumnos que vienen de ciclos formativos". El curso pasado -este año la conselleria no ha pasado, o no aún, datos desglosados-, solo el 35,09% de los estudiantes que procedían de ciclos formativos de grado superior superó la prueba.

Anomalías

La Universidad Ramon Llull ha celebrado este lunes el acuerdo. En un comunicado, sostienes que en los ocho años que aplicaron el criterio de la superación de las PAP antes de empezar el grado detectaron "anomalías no previstas y poco deseables". Una consecuencia de esta exigencia, afirman, es que muchos estudiantes no pueden acceder al grado, "muy especialmente los del colectivo procedentes de ciclos formativos de grado superior", a pesar de haber superado "los requisitos de acceso establecidos por ley", es decir, las PAU, el Ciclo Formativo de Grado Superior o la prueba para mayores de 25 años.

"Centenares" de estos alumnos, según Blanquerna, optan por "salir del país a cursar estos estudios a otra Comunidad Autónoma cercana o, incluso, a una universidad online estatal", algo que considera "paradójico" porque una vez terminan los estudios "nada les impide ejercer de maestros plenamente en Cataluny".