Tribunales
Condenado por estafar 87.000 euros a una empresa médica de Girona
El acusado realizó una transferencia fraudulenta por Internet a través de una cuenta de la mercantil a una cuenta propia sin autorización
El 97,5% de las denuncias por estafa informática en Barcelona quedan impunes
La Audiencia de Girona ha condenado a un hombre que perpetró una estafa informática a una empresa médica de Girona, quedándose 87.000 euros haciendo una transferencia fraudulenta, según informa Diari de Girona, medio del grupo Prensa Ibérica.
Tal y como reconoció este martes el acusado ante el tribunal de la sección tercera, el 2 de junio de 2020 efectuó una «operación informática fraudulenta» desde la cuenta corriente de la mercantil perjudicada a una cuenta de otra empresa de la que ostenta la titularidad exclusiva. La mercantil afectada no autorizó la transferencia, y la operación "no obedecía a ningún negocio jurídico", según admitió el procesado, sino que el objetivo era obtener un beneficio económico ilícito. La fiscalía subraya que podría haberse valido de la ayuda de un tercero que no habría sido localizado para perpetrar la estafa. La entidad bancaria donde la empresa afectada tenía la cuenta reintegró la totalidad del dinero, y por tanto es el banco quien se ha personado en la causa como acusación particular, reclamando que el acusado devuelva la cantidad sustraída.
Las partes llegaron a un acuerdo para evitar el juicio, rebajando la pena de seis años de prisión inicialmente solicitada por la acusación particular. La pena impuesta es de dos años de cárcel, y también tendrá que pagar el dinero defraudado en la entidad, además de las costas del juicio. La sección tercera ha acordado suspender la pena de prisión, pero deberá efectuarse un plan de pagos que si no cumple revocaría esta suspensión. El tribunal advirtió al procesado que debe comunicar cualquier cambio en su situación económica, porque el plan de pagos no es «fijo» y depende de su capacidad en cada momento. La sentencia es firme porque las partes han renunciado a interponer recurso.
Las estafas informáticas están más activas que nunca, y de hecho los últimos datos del Ministerio del Interior demuestran que en la provincia gerundense en el 2023 se perpetraron más estafas de este tipo que robos. En un año han aumentado un 20% superando las 8.500 denuncias, ya medida que han ido ganando terreno también se han perfeccionado los engaños. El tipo de cibercrimen más habitual son las estafas informáticas bancarias, que suelen constar de falsos avisos de secuestro de la cuenta o de solicitudes de datos privados por parte de delincuentes que se hacen pasar por la entidad.
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