Cinco detenidos por cultivar 1.700 plantas de marihuana en una vivienda de Maçanet de la Selva

Agentes de Policía Nacional desarticularon una banda dedicada a la producción de marihuana en el interior de una vivienda de polígono industrial de Maçanet de la Selva y detuvo a cinco sospechosos. A partir de la colaboración ciudadana, que alertó de la inseguridad por el constante paso de personas y vehículos y la sobrecarga del tendido eléctrico, los agentes empezaron a investigar y localizó a este grupo criminal.

Los sospechosos cultivaban marihuana en el interior de una vivienda y por eso usaban materiales de elevado coste, como focos LED de bajo consumo o filtros de carbono y extractores, para que no oliera fuera y ser detectados.

También utilizaban diverso material fertilizante para acelerar el crecimiento y aumentar el porcentaje de THC en las plantas de marihuana. Los agentes detectaron que los sospechosos tomaban medidas de seguridad y podían ser peligrosos al tener armas por lo que intervinieron unidades especializadas de la Policía, como la de Intervención, la Judicial y la de drones, ya que la plantación tenía grandes dimensiones.

En el asalto se sorprendió en el interior del recinto a cuatro detenidos que intentaron escapar e incluso arrojaron parte de la sustancia estupefaciente por el inodoro. El quinto sospechoso fue apresado cerca por agentes de la Policía Local de Maçanet de la Selva, que colaboraron en el dispositivo, aunque presentó una documentación falsificada. Tres de los sospechosos ingresaron en prisión provisional tras comparecer en el juzgado.

Los agentes requisaron dos armas de fuego largas y una pistola detonadora con numerosa munición de diverso calibre, documentación falsificada, 29,425 kilogramos de cogollos de marihuana, 5,185 kilos de peladura así como 1.724 plantas de marihuana.  

Para desmantelar la plantación se contó con la colaboración de técnicos de electricidad para restablecer el consumo en la zona, solventando el problema de cortes de luz padecidos por los vecinos. El importe eléctrico defraudado asciende a más de 30.000 euros.