Andorra da una prórroga a 5.600 empresarios para no tener que presentar las cuentas de 2023

Un total de 5.600 empresarios andorranos podrán acogerse este año a una prórroga para no tener que presentar "de forma excepcional" las cuentas anuales de 2023.

La medida, que afecta a la operativa contable de "pequeños autónomos" con una cifra anual de ingresos inferior a 150.000 euros, la ha anunciado la ministra de Presidencia, Economía, Trabajo y Vivienda, Conxita Marsol, según informa el Gobierno en un comunicado.

La novedad quedará regulada en una de las disposiciones finales de la ley de Presupuestos que está previsto que se vote el jueves 1 de febrero.

Marsol ha explicado que se ha pactado esta "mejora" para dar respuesta a una petición generalizada, según sus palabras, de los pequeños empresarios, así como del Colegio de Economistas, la Asociación de Asesores Tributarios y Fiscales de Andorra y la Cámara de Comercio.

Además, aquellos empresarios --personas físicas- que se hayan acogido al método de determinación objetiva de los rendimientos de su actividad para declarar el IRPF y que su cifra anual de ingresos sea inferior a 150.000 euros, quedan "excluidos" de depositar las cuentas anuales a partir del ejercicio iniciado el 1 d enero del 2024.

Se calcula que unos 275 empresarios que tributan en base a la determinación objetiva, es decir un 5% de las 5.600 empresas registradas con facturación inferior a 150.000 euros al año, no tendrán que depositar la contabilidad nunca.

Ley de contabilidad

Desde el Gobierno se recuerda que la Ley de contabilidad del 2007 tradicionalmente había excluido a los empresarios con una facturación mínima de presentar la declaración.

En diciembre de 2021, con la modificación de la Ley de Prevención y Lucha contra el Blanqueo de Dinero o Valores y la financiación del terrorismo, se estableció "la obligación para todos los empresarios" de depositar las cuentas.

Aun así, la Ley de medidas pera Mejorar el Poder Adquisitivo de la Ciudadanía restableció una "prórroga" en la obligación del depósito de cuentas para los pequeños empresarios con ingresos anuales inferiores a 150.000 euros, una circunstancia que se ha ido alargando durante los ejercicios posteriores.

En todo caso y aunque existan las exenciones, los empresarios están "obligados" a llevar la contabilidad de sus negocios.