La Xunta pide al Gobierno medios aéreos y marinos para atajar los pélets en el mar y personal para limpiar las playas

Después de un diálogo de sordos a través de los medios de comunicación en las últimas horas, la Xunta ha formalizado esta tarde su petición de medios al Gobierno central para afrontar la marea de pélets de plástico que desde hace semanas llega a la costa gallega.

El Ejecutivo gallego quiere siete lanchas, cuatro buques, dos helicópteros y un avión para tratar de localizar y recoger los sacos de microbolas en el mar; y además pide formación para los voluntarios que vayan a limpiar y "un retén suficiente de personal de tierra" en caso de que lleguen a tierra más "elementos contaminantes" provenientes del buque Toconao. También reclama un submarino de control remoto (ROV) para tratar de localizar, revisar y sellar el contenedor del que salen los sacos con las bolas.

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Una vez activado el nivel de alerta 2 (medio) del Plan Camgal, que permite la entrada de los medios del Gobierno central, desde Madrid se esperaba a que la Xunta remitiese de manera formal el detalle de su petición de medios. Representantes del Ejecutivo autonómico lo habían verbalizado antes los micrófonos y esta tarde, finalmente, lo han plasmado en un documento oficial dirigido a la Delegación del Gobierno tras la reunión de la dirección del Camgal.

La solicitud del Gobierno gallego prioriza los medios marinos para atajar el vertido en el mar, en coherencia con las declaraciones públicas realizadas por el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y la conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, en los últimos días. Sin embargo, el conselleiro del Mar, en una carta a los concellos afectados, explicaba que "debido a sus características no resulta posible la retirada de este residuo en el mar, ya que no se encuentra en la superficie, por lo que estas labores deben ser acometidas una vez que alcanzan la costa".

En su escrito, firmado por el director del Camgal, Lino Sexto Bermúdez, se insiste, en cambio, en que "la mayor parte de del material contaminante no llegó aún a la costa y se debe buscar su contención en el mar". La actuación del Estado, dice el texto, "ya se debería haber producido desde el 8 de diciembre", en alusión a la guerra cronológica que mantienen ambas administraciones.

Declaraciones del conselleiro

Ya en línea con la posición de la Xunta, el conselleiro de Mar, Alfonso Villares, ha instado hoy al Gobierno central a inspeccionar el lugar en el que desaparecieron los contenedores con los pélets que están llegando a las costas gallegas para frenar su dispersión.

En declaraciones a los periodistas tras reunirse con las cofradías de Portonovo y Sanxenxo, Villares sostiene que es una actuación "obvia" que se siguió en desastres naturales "parecidos" para comprobar si en el pecio hundido "hay más materiales o no".

"Habrá que ver ahí porque si no podemos estar esperando años a que siga llegando el material", ha defendido el responsable de Mar en el Gobierno gallego, que ha recordado que el Ejecutivo de Pedro Sánchez "sabe desde el 8 de diciembre" dónde desaparecieron esos contenedores.

"Mirar e inspeccionar"

Considera "fundamental" que los medios que movilice el Ejecutivo central "vayan a mirar y a inspeccionar" si esos recipientes están vacíos "porque igual tiene sacos llenos" y retirarlos desde el punto de origen permitiría frenar este episodio de contaminación.

"Hay que ir al sitio de la catástrofe para saber si hay más sacos o no", ha insistido.

Villares ha reiterado que la Xunta de Galicia reforzará el dispositivo activado para limpiar las playas "en función de lo que vaya apareciendo" y según los medios que envíe el Gobierno, que confía en que sean "todos los que tienen a su disposición".

El conselleiro, que ha rechazado la comparación con el Prestige al recordar que los pélets perdidos son 26 toneladas y aquel petrolero derramó 77.000 toneladas de fuel, ha pedido además a los consumidores que no dejen de comer pescado por esta situación.

"Hay cosas que perjudican la imagen del sector y se dicen cosas que no son las correctas", ha sostenido el conselleiro, que ha defendido que "cualquier otro resto plástico que estamos encontrando en las playas es más tóxico que esto".

A este respecto, el responsable autonómico ha abogado por coordinar los trabajos de limpieza entre todas las administraciones "con todo el sentido común, con toda cooperación y con todo mimo" en lugar de "dramatizar y perjudicar a todo el sector del mar".