Ministra de Ciencia, Innovación y Universidades

Diana Morant: "Estamos preparando un plan de choque para agilizar las homologaciones de títulos universitarios"

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Diana Morant, ministra de Ciència i Universitats, al costat del supercomputador MareNostrum 5, dijous. | MANU MITRU

Diana Morant, ministra de Ciència i Universitats, al costat del supercomputador MareNostrum 5, dijous. | MANU MITRU / VALENTINA RAFFIO

Valentina Raffio

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Diana Morant, hasta ahora ministra de Ciencia e Innovación, acaba de asumir también la cartera de Universidades. Hacía mucho que la comunidad educativa reclamaba esta fusión de competencias para agilizar los trámites y evitar quebraderos de cabeza entre ministerios. En una de sus primeras entrevistas desde que asumió la cartera universitaria, Morant habla con EL PERIÓDICO de los grandes retos de este ámbito.

El despliegue de la LOSU supondrá un importante desembolso económico. ¿De dónde saldrán los fondos?

Vivimos en un sistema donde existe el Gobierno del Estado, pero también existen las comunidades autónomas. Esto implica repartir las competencias y las obligaciones. En los últimos cinco años, el Gobierno de Pedro Sánchez ha financiado un 40% más a las comunidades autónomas que durante el Gobierno de Rajoy. Sin embargo, no hemos visto que las comunidades autónomas hayan traducido esto en un aumento de la financiación de servicios públicos básicos, como por ejemplo, las universidades. En la Comunidad de Madrid, por ejemplo, la inversión en universidades solo ha aumentado un 5%. Entonces, yo lo que pido es responsabilidades a las comunidades autónomas y que no miren para otro lado.

¿Y qué está haciendo el Gobierno para financiar las universidades?

Nosotros también estamos entrando en la financiación de parte de la actividad universitaria, pero no nos corresponde solo a nosotros hacer este trabajo. Las becas Ramón y Cajal, las convocatorias de generación de conocimiento, la inversión de 50 millones de euros en microcredenciales universitarias... Todos estos programas también son oportunidades que se traducen en el entorno universitario. De todas maneras, somos conscientes de que este reto debemos abordarlo de manera conjunta entre el Gobierno de España y las comunidades autónomas. Seremos exigentes, pero desde luego la finalidad es que se cumpla la ley, porque es una ley buena y lo que necesitan las universidades.

"El reto de financiación de las universidades debemos abordarlo de manera conjunta entre el Gobierno de España y las comunidades autónomas"

Cientos de universitarios graduados fuera de la UE denuncian un retraso de hasta tres años en la homologación de sus títulos. ¿Cómo prevén hacer frente a este problema?

Somos conscientes del embudo que hay en la homologación de títulos, que pasa por una mayor dotación de recursos, una digitalización del sistema y el despliegue de un nuevo marco de homologación europeo. Y estamos preparando un plan de choque para acelerar estos trámites. Hasta ahora nos regíamos por una normativa de 2014 por la cual todas las peticiones se recogían en papel y se tenían que estudiar de forma analógica. Desde el año 2022 hemos digitalizado el proceso y esto ya ha permitido agilizar el proceso. Estamos trabajando a nivel de la Unión Europea precisamente para que los títulos sean fácilmente homologables entre los países miembros. Por otra parte, también queremos tramitar con mayor agilidad los títulos de aquellos que ya tienen criterios de enraizamiento en nuestro país.

Los catastróficos resultados del informe PISA han puesto sobre la mesa el problema de la formación del profesorado. ¿Cómo se está planteando la reforma del grado de Magisterio y del máster de secundaria?

El informe merece un análisis en profundidad. A bote pronto, una de las primeras lecturas que podemos hacer tiene que ver con la distorsión que produjo la pandemia y la suspensión momentánea de las clases presenciales. Pero más allá de eso, es verdad que en el ámbito de la educación estamos obligados a tener la mirada puesta en cómo mejorar el sistema. Esto se tiene que hacer de la mano primero de los expertos en educación de las universidades, que son las que imparten en definitiva estas carreras, pero también del Ministerio de Educación. A partir de ahí es posible que tengamos que plantear nuevos marcos de formación, pero desde el consenso y con un análisis que avale en qué dirección debemos ir.

"Es posible que tengamos que plantear nuevos marcos de formación al profesorado de Magisterio, pero con un análisis que avale en qué dirección debemos ir"

En los últimos años estamos viendo un verdadero ‘boom’ de las universidades privadas en España. ¿Qué opina usted de este fenómeno?

Las competencias en universidades son de las comunidades autónomas y ahí hay ciertos gobiernos que tienen un propósito claro de convertir las universidades en un negocio. El problema de esto es que las universidades dejan de ser un derecho público y, por lo tanto, dejen de estar al alcance de toda la población. La Comunidad de Madrid es donde más universidades privadas han aparecido y a la vez es la comunidad que peor financia a sus universidades públicas por alumno. Y no es una casualidad. Desde el Gobierno tenemos el compromiso de combatir con todas las herramientas que tenemos el desmantelamiento de lo público y garantizar el acceso a una enseñanza pública y de calidad. 

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