Investigación en marcha

Prisión para el sospechoso principal de violar con sumisión química a una joven de Terrassa

La detención del segundo investigado ha quedado sin efecto porque se desconoce su grado de participación en la agresión sexual

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sumisión química

sumisión química / agencia

Guillem Sánchez

Guillem Sánchez

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Un juzgado de Terrassa ha ordenado el ingreso en prisión para uno de los dos detenidos por violar a una joven en Terrassa el pasado fin de semana. El otro sospechoso se encuentra en libertad. Los investigadores dejaron su arresto sin efecto porque aún no está claro qué papel tuvo durante la supuesta agresión sexual.

La víctima ha denunciado que fue abordada por el presunto violador en un establecimiento de ocio nocturno de Terrassa. Según su declaración, en el interior de ese local el hombre, de unos 20 años, le ofreció un chupito. Tras tomárselo, su estado de consciencia se vio seriamente alterado y fue conducida al domicilio del investigado. Allí, sin que todavía haya resultado posible aclarar si se encontraba presente el segundo investigado y qué grado de participación tuvo, la mujer fue atacada por el arrestado, según su denuncia, que se aprovechó de la vulnerabilidad que padecía tras la ingesta del vaso de licor.

La víctima tomó conciencia al día siguiente de lo sufrido la noche anterior y acudió a una comisaría de los Mossos para presentar una denuncia formal por estos hechos. Los policías catalanes arrancaron una investigación que comenzó por identificar a los sospechosos, al supuesto agresor y a un amigo, y que ha concluido con su arresto, efectuado este jueves, en un domicilio de Terrassa.

Este sábado el principal sospechoso ha pasado a disposición de un juzgado de Terrassa, que ha decretado que sea conducido a la cárcel preventivamente. El segundo detenido sigue bajo la lupa de los investigadores, que seguirán tratando de aclarar si se encontraba en la casa cuando la mujer fue agredida y, si ese fuera el caso, si participó de la agresión o no actuó para impedirla. El caso ya no se encuentra bajo secreto de sumario. 

Otra parte de la investigación debe comprobar ahora si el chupito que asegura haber consumido la víctima, y que la dejó en una situación de semiinconsciencia, contenía alguna droga disuelta por los agresores con el objetivo de adormecerla. 

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