Le pintan un grafiti en su tienda y lo registra y vende camisetas con él

El propietario de Goatxa, una pequeña tienda del barrio valenciano de Benimaclet dedicada a la estampación de textiles y todo tipo de productos personalizados, se encontró esta semana la firma de un grafitero estampada en su fachada y decidió registrar el diseño y venderlo en camisetas y gorras.

Lo que empezó como una pequeña broma se ha transformado en la venta de 400 camisetas en solo cuatro días.

"Primero me cabreé y luego me dije 'vamos a sacarle partido a todo esto'", afirma el comerciante, Juan Fran, en declaraciones a EFE, antes de añadir que el dinero recaudado (hasta el momento 5.000 euros) se lo va a dar a su madre que está jubilada "y no tiene una jubilación digna".