Vídeo | Gran despliegue policial contra ladrones de pisos y empresas de Catalunya

Agentes de los Mossos y de la Policía Nacional han desarticulado un grupo de ladrones de empresas y domicilios de Catalunya. La operación ha sido fruto de una investigación que arrancó el pasado marzo, cuando, por un lado, agentes de la Policía Nacional detuvieron a una persona, lo que permitió conocer cuatro robos con fuerza en empresas y, por otra parte, los Mossos identificaron a una serie de personas como presuntos autores de varios robos con fuerza.

Los policías han podido confirmar que inicio los ladrones actuaban en empresas, generalmente situadas en polígonos industriales, con la técnica del butón: accedían tanto por techo como por pared, anulaban la alarma y buscaban sustraer el material propio de las empresas y en alguna ocasión también violentaron la caja fuerte.

Vídeo | Golpe a unos ladrones de pisos de Barcelona

En cuanto a los robos en viviendas, los ladrones siempre actuaban en horario nocturno. Priorizaban las casas a cuatro vientos, ubicadas en urbanizaciones o lugares alejados de los centros urbanos. Escalaban los muros del jardín y buscaban ventanas o puertas para forzarlas y entrar en el interior del domicilio. Una vez dentro buscaban prendas o complementos, dispositivos electrónicos, joyas o dinero, con buena salida al mercado negro.

La investigación ha puesto de relieve que el grupo era muy activo y que tenía un alcance territorial considerable ya que operaban tanto en comarcas del entorno metropolitano de Barcelona como en la Catalunya Central y en las demarcaciones de Tarragona o Girona. En estos momentos los investigadores los relacionan con al menos 15 robos, cinco en empresas y diez en domicilios, en las siguientes localidades: Olesa de Montserrat, Sant Fruitós del Bages, Esparreguera, Navàs, Calafell, Sant Andreu de Llavaneres, Masnou, Creixell y Palamós.

Estructura criminal

El grupo tomaba medidas de autoprotección para tratar de dificultar la acción policial: ocultaban al máximo el rostro con tapabocas, pasamontañas o gorras y siempre utilizaban guantes. La investigación ha concluido que lo formaban un grupo de seis hombres, de edades comprendidas entre los 30 y los 56 años, aunque mientras han durado las pesquisas policiales su composición ha tenido alguna variación. Los agentes también han evidenciado que ha habido un cambio en su estrategia delictiva: han pasado de violentar a empresas a través de butrones a cometer robos en viviendas.

El 31 de agosto se hizo el dispositivo de explotación de la investigación con tres entradas judiciales, una en Sant Vicenç de Castellet y dos en L'Hospitalet de Llobregat. En cada uno de estos domicilios se pudo detener a uno de los ladrones. La investigación sigue abierta y no se descartan más detenciones.