El Govern prevé destinar hasta 15 millones a demoler peajes en C-32 Norte y C-33

El Govern prevé que la inversión total para la demolición definitiva de los peajes en la C-32 Norte y en la C-33 se sitúe entre los 12 y los 15 millones de euros.

El 1 de septiembre del año pasado estas dos vías dejaron de ser de peaje y su conservación corre desde entonces a cargo de la Generalitat, que es la titular. La concesión también finalizó hace un año en la AP-2 y la AP-7, si bien en estos casos la titularidad corresponde al Gobierno central.

Fuentes del departamento de la Vicepresidencia, Políticas Digitales y Territorio han estimado que el coste total de demoler los peajes en estas dos vías, para lo que ya se han invertido 4,8 millones de euros, oscilará entre los 12 y los 15 millones de euros.

El coste lo asume el Ejecutivo catalán al no constar en el contrato original que debía ser la empresa concesionaria quien se encargara de la demolición, lo mismo que sucede con las dos vías titularidad del Gobierno que ya no tienen peajes.

Las estructuras troncales de los peajes ya se han eliminado en ambos casos, de modo que se puede circular sin obstáculos por estas vías, pero quedan cabinas fuera del trazado y en las salidas.

El contrato que adjudicó el Govern por vía de emergencia para la conservación de las vías, por importe de 8,4 millones, incorporó una primera inversión de 4,8 millones para eliminar los peajes en la parte central de las vías. La emergencia fue obligada porque la licitación inicial, publicada en mayo, fue impugnada, aunque finalmente resuelta en favor de la Generalitat, explican desde el Departamento.

Así, a finales de año debe concluirse el proyecto constructivo de demolición y la adjudicación debería tener lugar a principios de 2023. Si se cumplen los plazos previstos, a lo largo de 2023 se eliminarán las estructuras de peajes que aún quedan en la C-32 Norte y la C-33.

Por otro lado, el Govern adjudicará durante el primer trimestre de 2023, según estimaciones del Ejecutivo catalán, el mantenimiento de estas dos vías: estima que rondará los 6 millones anuales y requerirá de una inversión extraordinaria de 15 millones de euros cada cinco años.

Por otro lado, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana no ha concretado el coste de demolición de los peajes en la AP-2 y la AP-7. Esta actuación se incluye, a diferencia de lo hecho por el Govern, en los contratos de conservación de las vías: un total de 92 millones durante 2 años, con opción a prórroga de otros 3 años.