Experimento en el Parc Científic de Barcelona

Más de un millón de firmas para frenar el experimento de los beagles

"Encima es un experimento en la UB que pagamos todos. El prestigio de la UB está en juego", denuncia la impulsora

Cachorro de Beagle para experimentación

Cachorro de Beagle para experimentación / Agencias

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Los impulsores de la campaña contra la experimentación y sacrificio de perros 'beagle' por los laboratorios Vivotecnia por encargo de la Universidad de Barcelona (UB) han "entregado" hoy simbólicamente cerca de 1.300.000 firmas recogidas a través de change.org en las instalaciones del Parc Científic de Barcelona. Tras la iniciativa, que comenzó hace un mes, están el creador de contenido Rubén García y una ciudadana catalana, Cristina Espinach, quien ha explicado a Efe que han entregado telepáticamente las firmas pues nadie de los laboratorios ni de la UB ha querido recibirlas.

Al acto "simbólico" de entrega de firmas, que ha despertado gran interés mediático, ha asistido también una delegación de PACMA, la única entidad u organismo que según ella ha mostrado activamente apoyo a la propuesta.

"Todos han hecho oídos sordos, también hoy los responsables del proyecto que no han querido ni recibirnos ni siquiera confirmar la recepción de firmas", ha lamentado Espinaca, quien ha reconocido estar impresionada por la "brutal" respuesta del más de millón de personas que han firmado la petición. Con todo, ha añadido, solo estarán "satisfechos" cuando los perros sean liberados de un experimento farmacéutico por el que, ha señalado, acabarán muriendo la mayoría de cachorros.

"Me enteré de este asunto alrededor de Navidad y no me dejaba dormir. Pensé que tenía que hacer alguna cosa. Hemos llamado a todas las administraciones sin respuesta, ya no sabemos a qué puerta más acudir", ha explicado Espinaca.

La ciudadana, motivada por la causa animalista, registró en change.org la petición sin saber que Rubén García lo había hecho pocas horas antes, y, tras darse cuenta, decidieron unir fuerzas, lo que les ha permitido recabar 1.290.000 firmas en todo el mundo en apenas tres semanas.

Si bien Espinach es consciente que en algunas circunstancias es legal la experimentación con animales, defiende que "hay alternativas" con las que se podría investigar para el medicamento en cuestión, para la fibrosis hepática. "Encima es un experimento en la UB que pagamos todos. El prestigio de la UB está en juego. No sé cómo se puede prestar a eso", ha denunciado.