¿Qué es un shock hipovolémico, la posible causa de muerte de Esther López?

A la espera de los resultados definitivos de la autopsia -que hasta el momento solo confirma que el cadáver presentaba signos de violencia- y con todas las hipótesis aún abiertas, la Guardia Civil se ha trasladado de nuevo este martes al lugar en el que fue hallado el cuerpo sin vida de Esther López, de 35 años, para buscar más pistas en la zona en la que fue encontrado el cadáver el pasado sábado, en una cuneta, en Traspinedo (Valladolid), pueblo de residencia de la víctima.

Y aunque no se han facilitado más datos al respecto de las causas concretas del fallecimiento de la chica, según diversas fuentes periodísticas como el diario 'El Mundo' o el programa 'Espejo Público', de Antena 3, la mujer podría haber muerto a causa de un shock hipovolémico, es decir, una pérdida excesiva de sangre (una quinta parte o más del volumen normal). Esta disfunción provoca la muerte porque hace que el corazón sea incapaz de bombear suficiente sangre al cuerpo y puede hacer que muchos órganos dejen de funcionar.

El shock hipovolémico puede ser fatal, pudiendo causar un paro cardiaco, gangrena en las extremidades del cuerpo y daño permanente en el cerebro, riñones u otros órganos.

Este tipo de shock suele ocurrir después de un traumatismo generado por un accidente de tránsito o una caída de gran altura, aunque también puede ocurrir por un corte muy profundo o durante una cirugía, como sucedió con Sara Gómez, la mujer que falleció en Cartagena después de someterse a una lipoescultura. También puede deberse a una hemorragia interna, úlceras sangrantes y menstruaciones muy intensas. Además de esto, las situaciones que provocan pérdida de líquidos -como diarreas o vómitos prolongados, una transpiración excesiva o quemaduras muy grave- pueden contribuir a la disminución de la cantidad de sangre en el organismo.

Cuando una persona sufre un shock hipovolémico por sangrado, que puede llamarse también shock hemorrágico, empieza a ponerse pálida, el pulso se hace casi imperceptible, disminuye la tensión arterial y poco a poco perdiendo la consciencia.

Lo que no queda claro aún es cómo se produjo el traumatismo de Esther, en caso de que finalmente el fallecimiento se haya producido por un shock hipovolémico. Los investigadores trabajan en tres hipótesis: que la mujer se cayera desde un lugar elevado, que recibiera varios golpes fuertes durante una discusión y, la más probable, que fuera atropellada, ya que su teléfono -que ha aparecido en el lugar donde fue hallado su cadáver- dejó de dar señal sobre las cinco de la mañana del día en que desapareció y ella iba vestida de negro.