Salvador Illa admite que fue un error asistir a una fiesta pese al estado de alarma

Illa admite las críticas por estar en un acto con 150 personas: "La mejor distancia es no estar"

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Patricia Martín

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Sin llegar a pedir perdón de manera explícita y públicamente, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha admitido este miércoles que se equivocó al asistir a la gala de <strong>entrega de premios </strong>organizada por 'El Español' y en la que coincidió con 80 invitados, entre ellos varios ministros, Pablo Casado e Inés Arrimadas. Miles de ciudadanos han mostrado en las redes sociales su indignación con el hecho de que, en pleno estado de alarma y cuando están restringidas las reuniones a seis personas, personalidades del mundo político, empresarial y deportivo coincidieran en una fiesta en la que, a la hora de cenar, se tuvieron que quitar la mascarilla.

En una intervención en el Congreso y antes de dar cuenta de la evolución de la pandemia, Illa ha querido aclarar que él asistió al acto "en representación institucional, el tiempo estrictamente necesario para arropar a uno de los premiados, las fuerzas armadas". Y tras la entrega del galardón, se fue y no se quedó a cenar. Aún así, ha reconocido que los ciudadanos "no han entendido" la celebración de dicho acto y, en su opinión, "tienen razón".  

A modo de 'mea culpa', ha señalado que incluso en los actos que cumplen "todos los requisitos", en referencia a la reducción de aforo y a las distancias entre asistentes y entre mesas, "hasta esos actos es mejor evitarlos". "El camino es tan sólo uno, la mejor distancia es no estar y todos debemos guiarnos por ese camino", ha reconocido.

Otras disculpas

A su vez, la portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha asegurado que aunque el acto "contaba con las medidas de seguridad decretadas por el gobierno de Madrid", los asistentes, instituciones y partidos políticos deben "hacer un acto de autoreflexión".

Mientras tanto, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pasado de puntillas por la polémica, evitando hacer declaraciones pese a que Gabriel Rufián ha sacado el tema en la sesión de control al Gobierno: "Mientras la mitad de este Hemiciclo estaba en el botellón del Ibex 35 de Pedro Jota [en referencia al fundador de 'El Español'] pasaba esto: un desahucio en Carabanchel. Cuatro críos con su madre, los muebles... está pasando prácticamente en todas las ciudades de este país", le ha espetado el diputado de ERC en el Congreso.

La opinión del alcalde de Madrid

Por su parte, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha admitido que debe hacer "autocrítica" por su asistencia al acto y ha reconocido que los representantes públicos deben "velar por la ejemplaridad" y hacer "una reflexión" sobre su participación en eventos de este tipo.

"Quizás en este momento deberíamos haber reflexionado acerca de si, aparte de cumplir con la normativa, estábamos transmitiendo el mensaje adecuado a la sociedad y, en ese sentido, hago autocrítica", ha declarado Martínez-Almeida.