El juez devuelve al jurado el veredicto sobre El Chicle por "deficiencias" y "posibles contradicciones"

El magistrado Ángel Pantín, que preside el juicio contra José Enrique Abuín por el asesinato de Diana Quer, ha devuelto al jurado el veredicto al considerar que tiene "deficiencias" e incurre en "posibles contradicciones". La decisión ha sido acordada y comunicada a las partes en una vistilla celebrada a puerta cerrada en los juzgados de Santiago de Compostela y tanto la Fiscalía, como la acusación y la defensa se han mostrado de acuerdo.

El presidente de la Sala sexta de la Audiencia de La Coruña ha tomado la decisión después de que este viernes se citase a todas las partes para revisar el fallo alcanzado por los miembros del tribunal popular a última hora de la noche del jueves, tras dos días y medio de deliberaciones, que finalmente no se hizo público al entender el magistrado que precisa una "mayor fundamentación", según han informado fuentes del TSJ de Galicia. 

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Los nueve miembros del jurado volverán por tanto a reunirse para revisar el contenido del fallo y subsanar todos los fallos. Las partes han vuelto a ser citadas este sábado a las 10 de la mañana y, hasta entonces, el jurado seguirá debatiendo para paliar esos errores formales y poder dictaminar si Abuín fue el culpable el asesinato y violación de Quer el 22 de agosto de 2016, cuando regresaba a su casa de verano tras las fiestas de A Pobra do Caramiñal (A Coruña). A pesar de la nueva convocatoria, fuentes judiciales advierten de que la deliberación podría prolongarse todo el fin de semana.

Juicio nulo

Según la ley del jurado, el juez tiene potestad para devolver el veredicto al tribunal popular hasta tres veces si encuentra fallos con el fin de que lo revisen y modifiquen. En caso de que persistieran los defectos, el juicio quedaría anulado.

El Ministerio Público entiende que el Chicle acabó con la vida de Diana Quer perpetrando el crimen con "pura maldad", "terror innecesario" y "ensañamiento psicológico" propios de un "depredador sexual" que además no siente arrepentimiento alguno y lo acusa, junto a la familia de la joven madrileña, de los delitos de detención ilegal, agresión sexual y asesinato con alevosía y ensañamiento, por lo que pide para Abuín la prisión permanente revisable.

Por su parte, la defensa solicita que el Chicle sea condenado por un delito de homicidio por imprudencia o, alternativamente, uno de homicidio doloso. Por tanto, aboga por una pena de dos años y medio de cárcel en el primer supuesto y de cinco a siete años de cárcel en el segundo caso.