NUEVO CONFLICTO EN EL TRANSPORTE URBANO

Los taxistas mantienen la huelga, pese a la propuesta de la Generalitat

Aumenta la tensión entre los taxistas en huelga en Barcelona

Aumenta la tensión entre los taxistas en huelga en Barcelona. /

J. G. Albalat

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A pesar del principio de acuerdo alcanzado por el comité de huelga de los taxistas de Barcelona con la Generalitat, el sector duro del gremio se ha impuesto y la protesta con el corte de la Gran Via de Barcelona continuará, al menos, este domingo. Así lo han decidido estos profesionales en una tensa asamblea celebrada en la noche del sábado. El pacto alcanzado con la Conselleria de Territori i Sostenibilitat ha saltado por los aires. Y es que el Ejecutivo catalán puso como condición para tirar adelante su propuesta sobre Uber y Cabify que se levantara la huelga idefinida convocada el viernes, cosa que no ha ocurrido. 

Las más de tres horas de tensa y estresante reunión entre el comité de huelga de los taxistas y la Conselleria de Territori i Sostenibilitat no sivieron para desconvocar la protesta. Al encuentra, presidido por el 'conseller' Damià Calvet, participó representantes de la Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y Joan Gaspart, del Consorci de Turisme de Barcelona. No fueron invitados Uber ni Cabifay, las dos plataformas de vehículos de alquiler con condutor, conocidas como VTC.  El 'president' Quin Torra ha intervenido para desbloquear la situación, según los taxistas. 

La Generalitat propuso al colectivo de taxistas que, a parte de los 15 minutos necesarios para reservar una VTC, se estableciera otra horquilla de tiempo adicional que todavía no se ha precisado. Este periodo de tiempo lo fijará cada ayuntamiento. En el caso de la capital catalana, lo hará el AMB, que engloba a 36 municipios donde viven 3,2 millones de personas, a través de un reglamento. Los criterios serán "territoriales, ambientales y de duración del servicio", precisó Calvet. 

Estas condiciones deben ser estudiadas en el Consell Executiu de la Generalitat del próximo martes por la mañana y por la tarde está prevista otra reunión con los taxistas. Un día antes, el lunes, el 'conseller ' Calvet se va a reunir con representantes de la VTC, que este sábado también ha cortado varios carriles de la avenida Diagonal durante horas. Ahora, todos esos planes se han roto y el futuro es incierto. "Ha habido un paso adelante de la Generalitat", ha reconocido un representante de los taxistas.

La oferta, sin embargo, ha causado el enojo de las VTC, que barajan la posibilidad de bloquear el Mobile World Congress porque no les gusta la propuetsa de la Generalitat a los taxistas.

El paisaje del centro de Barcelona amaneció este sábado alterado. La concentración en la Gran Via de la capital catalana decenas de taxis complicó la circulación fluida de vehículos por los alrededores de plaza de Catalunya, a semejanza de lo ocurrido en viernes, cuando los taxistas decidieron convocar una huelga indefinida para protestar por el decreto impulsado por la Generalitat. 

Las rebajas

La campaña de rebajas en las tiendas del paseo de Gràcia y de las calles cercanas, sin embargo, no resultó perjudicada en exceso este sábado. El viernes fue peor. "La gente está habituada a venir al centro de Barcelona a pie", explicó la responsable de un establecimiento de telefonía móvil. En los comercios de ropa la actividad era la habitual, aunque sus dependientes aludían a la escasa presencia de turistas extranjeros. "Si hay jaleo, no se acercan", sostuvo una empleada de una tienda textil que, eso sí, se quejó de la dificultad que había tenido para llegar a su trabajo. 

Los taxis permanecieron estacionados en medio de la Gran Via toda la noche del viernes al sábado y el resto del día. Los bares hicieron el agosto suministrando bebida y comida a los concentrados que se agolpaban en corrillos para comentar la jugada. Este sábado, a las 12.30 horas y tras el fracaso de la reunión del viernes, se convocó una asamblea en el lugar habitual: en el paseo de Gràcia entre la Gran Via y la calle de Casp.

Agresión a un periodista

Los ánimos estaban alterados y la tensión entre el colectivo de taxi era evidente. Hasta tal punto que unos minutos después de que Alberto Álvarez, alias Tito, el portavoz de Élite Taxi, reclamara “violencia cero”  y rechazara los ataques a de Uber y Cabify el viernes ("somos taxistas, no terroristas"), los empujones y golpes entre dos grupos acabaron con la agresión al periodista de 'El País' Alfonso Congostrina, que recibió un brutal cabezazo en la cara cuando cubría con su labor informativa. Una ambulancia lo trasladó sangrando a un centro sanitario. "Llamamos a la tranquilidad y a la calma. La violencia no es el camino. Los periodistas están haciendo su trabajo", subrayó tras el incidente el miembro e Élite Taxi.

Unauto, la patronal las VTC, estima que unos 50 coches de Uber y Cabifay han sufrido daños durante las protestas de taxistas. Fuentes de esta entidad, que representa a buena parte de estas empresas, aseguran que todavía están recabando datos sobre el estado de los conductores que sufrieron esos ataques, aunque estas fuentes han recordado a un conductor de un VTC sufrió el viernes un ataque de ansiedad y tuvo que recibir atención médica. La policía detuvo a siete personas por estos acosos.

"La cesión al chantaje por parte del 'conseller de' Territori de la Generalitat, Damià Calvet, que ha estado alimentando las pretensiones descabelladas del taxi, ha propiciado los disturbios vividos ayer y ha dejado claro al sector del taxi que puede conseguir su objetivo de eliminar la competencia mediante el uso de las amenazas y la violencia", aseguró este sábado Unauto en un comunicado.

Cabify, por su parte, también condenó los actos de violencia "de los sectores más radicales del taxi en Barcelona"  y ha hecho un llamamiento "a la calma, al respeto y al diálogo". En un comunicado, esta firma ha asegurado que "la toma de decisiones políticas precipitadas y sin consenso está en el origen de este problema" En su opinión, el  decreto anunciado por el Gobierno catalán, que establece un tiempo de contratación de al menos 15 minutos para los VTC "no tiene el nivel de reflexión ni de consenso suficientes".

Dos sectores entre el colectivo

A pesar del apoyo unánime a la protesta, en el debate se constató dos sectores. Uno de ellos defendía que lo que se estaba ahora reivindicando era, sobre todo, que se eliminara del decreto promovido por la Generalitat que la contratación de un Uber o un Cabify tenga que hacerse con 15 minutos de antelación (ellos proponen 24 horas, aunque estaban dispuesto a bajar a seis).

Otro grupo de taxistas iba más allá y reclamaba que se dejara sin efecto la moratoria de cuatro años del Gobierno de Madrid que permite a los conductores de estas plataformas poder seguir operando durante este periodo, pasado el cual las comunidades autónomas podrán decidir cuantas licencias renuevan o incluso se no renueva ninguna. “Yo no quiero convivir con ellos y no vamos a estar luchando siempre por la regulación”, explicó un dirigente de este sector que insto a convocar en forma una asamblea para decidir los objetivos que se desean lograr. Aunar tantas sensibilidades se hace complicado. Lo que si todos estuvieron conformes es de crear un servicio de taxis gratuito para servicios sociales y para personas con discapacidad..

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