Un interno de Cáceres

Muere de un tiro el preso que ha soltado las muletas y se ha fugado corriendo en un traslado

El interno, que no iba esposado para poder llevar los apoyos, iba a prestar declaración en el Palacio de Justicia de Cáceres

Imagen de recurso de la Guardia Civil

Imagen de recurso de la Guardia Civil / periodico

El Periódico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Un interno de la prisión de Cáceres ha muerto este viernes por una herida de bala en el tórax recibida tras huir de los policías que lo custodiaban cuando estaba siendo trasladado al Palacio de la Justicia de la capital cacereña donde iba a prestar declaración.

El hombre, de 24 años, ha sido ingresado en estado crítico en el Hospital San Pedro de Alcántara. 

Considerado "muy peligroso" por la Policía Nacional, el preso ha llegado al juzgado en un furgón procedente del centro penitenciario de Cáceres. No iba esposado porque caminaba con muletas y, en un momento dado, al bajarse del coche que lo trasladaba y antes de entrar en las dependencias judiciales, ha soltado las muletas y ha echado a correr por las inmediaciones sin que los agentes que lo custodiaban pudieran impedirlo.

Aunque varios agentes le han perseguido hasta las inmediaciones del entorno de la Montaña de Cáceres, paraje próximo a los juzgados, el preso ha logrado en un primer momento evitar ser localizado y detenido.

El hombre formaba parte de la presunta banda de atracadores de joyerías que fueron arrestados en enero tras una espectacular persecución por las calles del centro de Cáceres. Ante esta situación, la Policía Nacional estableció un dispositivo de búsqueda en el que participaron también agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil. Finalmente los agentes han dado con él y le han disparado.